México ocupa el sexto lugar en el mundo en obesidad de su población adulta. Estados Unidos es el país con el mayor número de personas obesas, con 93.8 millones. Le siguen China, Brasil, India, Rusia y México.
De acuerdo con la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura, la FAO, México pasó de 20.5 a 24.3 millones de personas con este mal entre 2012 y 2016.
En su informe "El estado de la seguridad alimentaria y la nutrición en el mundo 2018", la FAO alertó que una de cada ocho personas tienen obesidad, a nivel global.
Entre los factores que pueden influir en el sobrepeso y la obesidad destacan el costo alto de los alimentos nutritivos y la facilidad para conseguir comida procesada.
El organismo advierte que al problema de obesidad se suma el de la subalimentación, entendida por la escasez de nutrientes o las cantidades ingeridas.
En 2017, el número de individuos con alimentación insuficiente llegó a 821 millones en los cinco continentes.
Seis millones más que en el 2016 cuando eran 815 millones.
En México, se logró reducir el número de personas que no ingieren la cantidad de nutrientes suficientes.
En 2006, eran seis millones y en el 2017 la cifra bajó a 4.8 millones.
Otro dato positivo es que disminuyó el número de niños menores de cinco años que padecen retraso en su crecimiento.
Además, en el mismo periodo se logró aumentar el número de menores de hasta cinco meses de edad que son alimentados exclusivamente con leche materna.
De 300 mil pasaron a 700 mil.
La FAO consideró que factores como conflictos armados y la variación en el clima, que dificulta actividades como la agricultura, propician que grupos vulnerables enfrenten más dificultades para acceder a una alimentación de calidad.
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