Rusia acusó hoy a la Unión Europea de "injerencia" en sus asuntos internos tras la imposición de sanciones por la construcción del puente de Crimea y advirtió de que esa decisión tendrá consecuencias para las empresas europeas que operan en territorio ruso.
Según la Cancillería rusa, Bruselas sigue molesto por "la libre elección de los crimeos a favor de la reunificación con Rusia".
"¿Cómo si no explicar el hecho de que desde 2016 la lista de los sancionados de la UE se amplía casi exclusivamente con nombres de ciudadanos y entidades rusas de una manera u otra relacionados con el desarrollo democrático y exitoso de Crimea y Sebastopol en el seno de la Federación Rusa?", pregunta el Ministerio en un comunicado oficial.
La nota agrega que "el pretexto para una nueva intervención en los asuntos" de Rusia elegido por Bruselas es "sumamente simbólico".
Moscú calificó de "lamentable" la decisión de sancionar a seis empresas rusas que participaron en la construcción del puente de Kerch, que une Rusia con la península anexionada, y advirtió de consecuencias para las empresas europeas en territorio ruso.
"En Rusia operan muchas compañías de los países de la UE, incluidas las que trabajan en el sector de la construcción y cuyos intereses pueden verse perjudicados por la nueva espiral de sanciones", señala la nota.
Las medidas anunciadas hoy por el Consejo de la Unión Europea suponen la inmovilización de todos los bienes de las seis entidades situados en la UE, y además prevén que tanto personas como entidades de los Veintiocho no puedan poner fondos a disposición de las sancionadas.
La decisión eleva a 44 el total de entidades incluidas por la UE en la lista de sancionados por la crisis en el este de Ucrania.
Además, los Veintiocho han prohibido a 155 personas viajar a territorio comunitario y les han congelado sus activos.
El puente de Kerch, de 19 kilómetros de longitud, une Rusia continental con Crimea sin pasar por territorio ucraniano, fue inaugurado el pasado mayo por el presidente ruso, Vladímir Putin.
La construcción del puente, inaugurado el pasado 15 de mayo por el presidente Vladímir Putin fue una de las promesas del líder ruso tras la anexión de la península en marzo de 2014, después de un referéndum en la península no reconocido por Ucrania ni la comunidad internacional.
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