Cuántos de nosotros hemos imaginado cómo será el futuro: si se verá con en las películas de Steven Spielberg, si existirán los coches voladores o si la tecnología nos ayudará a mover cosas con la mente. Sin embargo, la tecnología está más adelantada de lo que muchos creen y para nuestra suerte esto ha sucedido en el plano musical.
Por segunda ocasión Hatsune Miku regresó a la Ciudad de México para ofrecer una presentación en el Pepsi Center. Esta idol japonesa no es un artista cualquiera. Nada de diferente tendría hablar de una chica de piel blanca, ojos claros y cabello color turquesa peinado en dos coletas y que se sube a cantar en un escenario, de no ser porque Hatsune es en realidad una de las primeras artistas virtuales que ha conseguido hacerse de miles de fans alrededor del mundo con su carisma.
La historia de esta estrella internacional se remonta a agosto de 2007, cuando se dio a conocer de la mano de Hiroyuki Ito, el CEO de Krypton Future Media, empresa encargada de desarrollar este videojuego que rápidamente se convirtió en uno de los favoritos entre los nipones y que se coló en en el gusto de jóvenes alrededor del mundo.
Su nombre significa “el primer sonido del futuro”. Lo que inició como parte de un videojuego en donde los usuarios adquirían un software llamado Vocaloid y componían temas para que Miku las interpretara, se convirtió en un fenómeno con una carrera tan popular como la de cualquier otra estrella pop.
Es esa popularidad la que la ha llevado a hacerse de un catálogo musical que acumula, hasta el momento, más de 100 mil canciones en diversos idiomas. ¿Cómo es esto posible? El usuario compra el software Vocaloid, después, cada canción creada entra en un concurso para convertirse en la más popular con la esperanza de que la artista decida hacerla parte de su setlist.
Esto le ha garantizado a “la cantante” abarrotar escenarios en distintas partes del mundo. Acompañada por un grupo de músicos que tocan en vivo, Hatsune aparece y es aplaudida con furor y alegría.
Podría ser que otro de los elementos por los cuales su encanto crece es que ella no envejece, así como el hecho de que la actitud mostrada por la animación siempre transita entre la picardía y la sensualidad. Viste falda corta, siempre trae audífonos y sus coletas se han convertido en uno de los disfraces de cosplay más solicitados.
Su popularidad ha atravesado la barrera virtual pues otros artistas han trabajado con ella. Así fue con Pharrell Williams y con Lady Gaga, quien le permitiera ser su telonera en una gira.
Con información de El Universal.
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