Miguel Ángel Guerrero | 19/07/2018 | 12:10
La anunciada desaparición de las delegaciones federales en San Luis Potosí como parte de las 50 medidas de austeridad y combate a la corrupción anunciadas por el presidente electo Andrés Manuel López Obrador, el nerviosismo y el temor al desempleo se han instalado en todas las existentes pues aunque no está claro la forma en que desaparecerán los empleados saben que en cualquier momento puede activarse la barredora que los puede enviar a las filas de desempleados.
La decisión tomada por AMLO en ese sentido, debe decirse no ha causado alarma o pesar en ningún sector potosino pues el papel de los delegados en general ha sido básicamente de ornato por la marcada deficiencia en su desempeño, lo que no quita que haya habido en el pasado excepciones notables pero, lamentablemente para SLP, de diez o quince años a la fecha el gris ha sido el tono que ha marcado su trabajo como delegados como podría ejemplificarse con los casos de los de ProfepaSemarnat que ante los graves daños ambientales ocasionados por la Minera San Xavier que opera en Cerro de San Pedro se han visto sospechosamente inútiles para meter al orden a esa empresa canadiense pese a que ya dio a conocer que en cualquier momento dejará de operar con el riesgo de que dejen sin remediar la zona altamente contaminada de cianuro y arsénico pues no han informado sobre alguna acción preparada con el fin evitar que se vayan sin cumplir con esa obligación.
En otro orden también es famosa la apatía de la delegada de la SEP Lucía Gárate quien con ese desempeño deficiente hace recordar el extraordinario trabajo desarrollado por el mejor que ha ocupado ese cargo como fue José Luis Cervantes Gonzáles uno de los artífices del “boom” educativo que vivió San Luis en los tiempos del profesor Carlos Jonguitud Barrios.
Por otra parte el puesto de delegado ha servido a algunos vivillos para engrosar considerablemente sus cuentas bancarias como uno encargado de vigilar pesas y medidas de un producto con lo que ingresa por fuera gana más que el mismo presidente Enrique Peña Nieto pues se embolsa mensualmente algo así como un millón de pesos libres de polvo y paja y sin pagar impuestos en virtud de que se los entregan por debajo del agua por hacerle al occiso ante pequeños pecadillos de un sector de comerciantes.
CABOS SUELTOS
Es posible que este día regrese al cargo de alcalde de Soledad Gilberto Hernández Villafuerte luego de que ganó la reelección el primero de julio y desechados los problemas que le quisieron armar fue el que se llevó el triunfo de la honra para la gallardía… Por cierto, gente cercana al alcalde Ricardo Gallardo Juárez aseguran que no soporta la idea de que la gente lo vea con imagen de perdedor, algo a lo que no estaba acostumbrado triste realidad que no supieron prever sus colaboradores y estrategas políticos y peor se le va a poner si Xavier Nava lega con la espada desenvainada pero su gente no ve para adelante y él lo seguirá pagando.