Lilia Quevedo/Plano Informativo | 29/06/2018 | 00:30
San Luis Potosí, SLP.- Diferentes posturas ideológicas, intolerancia y ánimos cada vez más encendidos, potencializan los brotes de violencia durante y posterior a los comicios del 1 de julio.
La violencia política es un fenómeno que ha ocurrido en las 32 entidades federativas del país, en algunos estados y municipios se ha intensificado debido a su posición estratégica y a su concentración de electores.
Aunque en menor medida, también han ocurrido sucesos escalofriantes en San Luis Potosí, el último fue el deceso de Mateo Puente Rocha, coordinador de campaña de Bertha Amaya, candidata de la coalición Por México al Frente, a la presidencia municipal en Vanegas.
El primer acontecimiento surgió en marzo del 2018, cuando el candidato a diputado federal por el Partido Movimiento de Regeneración Nacional (Morena) fue baleado en las calles de Tenería y Carlos Lasso, en Matehuala.
En abril, el candidato por el Partido Acción Nacional (PAN) y Movimiento Ciudadano (MC) a la alcaldía capitalina, Xavier Nava Palacios, denunció presuntos robos y ataques en el Fraccionamiento Tangamanga y en el departamento de uno de sus colaboradores.
En mayo rafaguearon la casa del candidato a una diputación local por el Partido Acción Nacional (PAN), Ricardo Villarreal; el ataque causó la muerte de su colaborador Juan Carlos Martínez, de 27 años, y dejó a tres personas heridas. La tragedia ocurrió en la Colonia Prados Satélite.
La Procuraduría General de Justicia del Estado (PGJE) abrió una carpeta de investigación por un presunto ataque a un candidato a la Presidencia Municipal de Ciudad Fernández, que derivó en el incendio de la camioneta tripulada por el abanderado del Partido Verde Ecologista de México.
Sobre lo ocurrido en Vanegas, la Comisión Estatal de Derechos Humanos (CEDH) hizo un llamado a las autoridades locales y a todos los actores políticos a que contribuyan a garantizar la seguridad y la integridad personal de todas las personas que desde una candidatura participan en la contienda, sus equipos de campaña, simpatizantes, así como de toda la ciudadanía.
Rubén Salazar, director de Etellekt, consultora generadora del Sexto Informe del Observatorio de Violencia Política, señaló que el incremento de acontecimientos brutales se ha intensificado con el paso de los años, si bien se presentaron casos aislados en las elecciones del 2012, el fenómeno se intensificó en este proceso electoral federal.
El experto consideró que quizás estas podrían ser las elecciones más violentas que México ha presenciado, pues desde el 8 de septiembre del 2017, hasta el inicio de la veda electoral, 132 políticos han sido asesinados; el 80 por ciento de los decesos corresponde a candidatos municipales.
También se registró un total de 543 ataques a políticos de todo el país y 179 dirigentes recibieron amenazas o actos intimidatorios