Túnez protesta por declaraciones de nuevo gobierno italiano

El gobierno de Túnez protestó hoy formalmente por las declaraciones del nuevo ministro italiano del Interior, Matteo Salvini, líder de la Liga Norte, quien acusó al país africano de “exportar convictos”.

“Las declaraciones del ministro del Interior no reflejan la cooperación entre los dos países en el manejo de la inmigración e indican un conocimiento incompleto de los diferentes mecanismos de coordinación entre los servicios tunecinos y los italianos para enfrentar este fenómeno”, dijo una nota de la cancillería tunecina.

La cancillería de Túnez expresó en la nota su “profundo estupor por las declaraciones del ministro del Interior italiano sobre el tema de la inmigración” e informó haber convocado al embajador italiano, Lorenzo Fanara, para manifestarle su posición.

“Nuestro país ha reiterado su voluntad de continuar con el nuevo gobierno italiano por la vía de la consolidación de las relaciones de fraternidad y de colaboración estratégica en vigor entre los dos países”, añadió la nota.

Este domingo, en un mitin en Pozzallo, Sicilia, Salvini, que es también vicepremier, declaró que “Túnez es un país libre y democrático que no está exportando caballeros, sino a menudo exporta convictos”.

Aseguró que hablaría del tema con su homólogo tunecino e insistió en que en la nación africana “no existen guerras, pestes o carestías” que justifiquen la migración hacia Italia.

Según datos del Ministerio del Interior italiano, en los últimos meses han caído en 85 por ciento los arribos de migrantes desde Libia, mientras han aumentado las llegadas desde Túnez.

En particular, señaló, entre el 1 de enero y el 1 de junio llegaron a Italia 2 mil 889 tunecinos.

En tanto, Salvini dijo que no participará en la cumbre europea de ministros del Interior sobre migración prevista para este martes en Luxemburgo, aunque aclaró que enviará una delegación para rechazar el documento en discusión que, en su opinión, penalizaría a Italia y favorecería a los países del norte de Europa.

Se trata de la negociación para la reforma del reglamento de Dublin, que establece los criterios y mecanismos para determinar el país miembro de la Unión Europea responsable de analizar una solicitud de asilo o protección internacional presentada por un ciudadano de un tercer país.

El nuevo ministro italiano del Interior también anunció recortes al presupuesto destinado a la acogida de inmigrantes y la deportación de miles de indocumentados.

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