El Séptimo Distrito local, uno de los más grandes del estado, ha sido bastión de Acción Nacional desde hace décadas, sin embargo podría convertirse en centro de disputa luego de la representación de Mariano Niño Martínez y los escándalos en los que se ha visto envuelto, y que originaron el interés de los votantes por candidatos independientes y demás partidos que esperan lograr un resultado favorable y así cambiar el color de este distrito.
En 2015, el distrito VII tenía en la lista nominal a 152 mil 35 ciudadanos. En aquel proceso electoral se obtuvo un nivel de participación “mejor” del que se esperaba, ya que se logró un 55 por ciento -84 mil 813 votos, de los cuales 29 mil 916 fueron para el actual diputado, muy lejos quedó el PRI con 8 mil 905 sufragios.
Los ciudadanos tienen 6 opciones para elegir a su próximo diputado.
La abanderada del PRI, Pilar Zarate Delgadillo, confía en obtener el triunfo el 1 de julio, porque a quienes aspira representar se sienten abandonados, sobre todo comunidades y sitios alejados de las comodidades que caracterizan al distrito. “Es un distrito que tiene tres diferentes realidades, y todas coinciden en que el diputado una vez que ganó, no regresó y no ha tenido el desempeño esperado”.
Pese a los números que por mucho superan al de su más cercano competidor, el candidato de Acción Nacional y Movimiento Ciudadano, José Antonio Zapata, no confía en una elección que ya podría “estar cantada”, su promesa de llegar a la LXII Legislatura es reivindicar la figura del diputado, ya que es una petición de los ciudadanos con los que ha coincidido en esta campaña, dijo en entrevista para Contacto Informativo.
Pese a que hay un descontento generalizado por la figura del legislador, la población ha recibido a los candidatos, coincidieron ambos. José Antonio Zapata recordó que cada vez más se vota por proyectos, por eso se tiene que dar una batalla histórica para tener los mejores resultados.
Pilar Zarate destacó que ha tenido una campaña pacífica, alejada -afortunadamente- de la violencia política que está empañando y convirtiéndose en una característica del proceso, atribuyendo a la participación de la población quienes está ávidos de escuchar un mensaje que cambie mediante leyes su forma de vida y desarrollo.
Coincidieron en que será la propuesta la que determinará el resultado, y como principal obstáculo está el abstencionismo.