Luego de la repentina popularidad que obtuvo Rubí Ibarra, de 16 años, a raíz de que se hiciera viral la invitación para sus XV años, en 2016, en una humilde ranchería en La Joya, San Luis Potosí, su padre, Cresencio Ibarra, de 40, aceptó la invitación del representante de artistas Rubén Rojas (mánager de Maribel Guardia y Lorena Herrera) para llevar su carrera.
Sin embargo, confesó que tuvo una amarga experiencia. Lejos de concretarle presentaciones, Rubén la orilló a ser cantante de reggaeton, acusa que sólo les pidió dinero y ahora tiene una deuda de más de 100 mil pesos.
En entrevista, Don Cresencio asegura que su inexperiencia en la farándula lo hizo ‘caer’ en las promesas de Rojas, quien les pidió el manejo de las redes sociales oficiales de Rubí, donde tenía más de 200 mil seguidores y ahora no sólo se niega a regresarlas, sino que las borró.
-Don Cresencio, recientemente Rubí creó nuevas redes sociales, ¿por qué sucedió esto?
“Es una historia larga y se dio cuando conocimos al mánager de Rubí, Rubén Rojas, quien se las quedó. Lo conocimos hace unos siete meses, cuando venimos a los premios MTV en la Ciudad de México. Ya lo habíamos visto antes, pero ahí llegamos a un arreglo ‘entre comillas’ para convencernos de llevar la carrera de Rubí y nos pidió que nos viniéramos a vivir a la CDMX”.
-¿Qué les ofreció?
“Nos prometió llevar la carrera como cantante de Rubí, pues decía que tenía conocimiento de los ‘medios’ y del ‘manejo’ de todo tipo de música, conseguiría contratos y hasta tramitaría su visa de trabajo (de Estados Unidos). Dijo que él pagaría el departamento donde viviría Rubí y también su alimentación”.
-¿Lo cumplió?
“Me parecía difícil, pero nos llevó a mi hija, mi esposa Ana y a mí a vivir a un departamento de 15 mil pesos de renta al mes, en la zona de Parque San Antonio en la delegación Álvaro Obregón. A mí me parecía caro, pero mi hija estaba muy ilusionada y don Rubén me dijo que yo lo pagara en lo que salía trabajo, y acepté”.
-¿Por qué don Rubén no cubrió esos gastos?
“Dijo que estaba muy ‘endrogado’ porque había pagado unas canciones y con el pago de un video a otro cantante. Me pidió que ‘le echara la mano’ y después recuperaba mi dinero. Yo firmé el contrato de arrendamiento y pagué todos los gastos”.
-Vimos que Rubí hizo ‘mancuerna’ con un joven de nombre Yhan, para el video, ¿por qué con un reggaetonero?
“Mi hija tenía una idea para ‘lanzarse’ como cantante de música grupera, pues somos ‘gente de rancho’, pero don Rubén tenía otros proyectos con el cantante Yhan Rivera, y ahí nos engañó, pues quería usar a Rubí para ‘sacar’ a este muchacho del anonimato. Hasta grabamos un video musical en Acapulco, Guerrero”.
-¿A qué se refiere?
“De alguna manera, este muchacho se iba a hacer conocido con Rubí. No estaba de acuerdo con el estilo de música que le propuso: reggaeton, pues ella quería grupero. Con el tiempo vimos que comenzó a ‘desobligarse’ del pago del departamento; bueno, nunca lo pagó y me decía que me lo repondría. Eso también son mentiras. Yo pagué los ocho meses que estuvimos allá en la CDMX, dos meses de anticipo que se perdieron, porque no cumplí el año. Pero también pagaba comidas, servicio de Sky y fue un gasto muy fuerte para mí. Nos desesperamos”.
-¿Iban a producirle un disco?
“Así es, hasta se nos acercó gente para mandarnos canciones, no eran compositores famosos, pero se las enseñé a don Rubén para saber si le gustaban y él decía que no, pues estaban feas. Finalmente, la puso a grabar canciones que no nos gustaban. Lo platicamos y aun así quiso hacer otro video musical. Le dije que ya no invirtiera, pues las cosas estaban saliendo mal, ya que me seguía endeudando. Él me dijo que pidiera 100 mil pesos para pagar los temas y el video, me aseguró que me los recuperaría, pero a mí ya me están cobrando los intereses”.
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