Dicen que el karma es el juez de nuestro actos, la energía trascendente e invisible que se deriva de nuestros comportamientos y que va acumulando consecuencias conforme a ellos.
Aunque quizá no seas supersticioso seguramente has crecido con esta 'ley' muy presente.
"Lo que siembras es lo que cosecharás", dice una frase.
Lamentablemente hay personas que no les importa esto y van por la vida 'sembrando' cosas malas.
Recientemente se dio a conocer que en Argentina en el pueblito de General Pinedo, Aníbal Fernández, un hombre con el corazón roto y lleno de rencor irrumpió en la casa de su ex, Carina Carbajal, con un rifle calibre 22 con la intensión de enfrentar a Daniel Campos, el nuevo novio de la mujer, que se encontraba allí.
De acuerdo con medios locales, Fernández le disparó a Campos cuatro veces en los brazos y en el pecho después de una acalorada discusión.
Aunque el agresor creyó que su venganza estaba terminada y que había salido triunfante, jamás imaginó que el karma -si, ese que te hablamos al principio de la nota- le llegaría antes de lo esperado.
Cuando huía, gatilló su arma por accidente y quedó incrustado en las rejas de la casa.
Mientras Carina atendia a su novio escuchó un disparo afuera y al asomarse vio a Fernández colgado y un charco de sangre donde yacía el arma.
Contra todo pronóstico, Campos sobrevivió después de ser trasladado al hospital pero Fernández murió al instánte.
La noticia se difundió rápidamente en redes.
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