El Ejército israelí acusó a los palestinos en la Franja de Gaza de haber utilizado hoy una "violencia sin precedente" en las protestas por la inauguración de la embajada estadunidense en Jerusalén y el 70 aniversario de la fundación del Estado judío, que dejaron hasta ahora más de 40 palestinos muertos.
Tres células terroristas con armas de fuego intentaron atacar a los soldados israelíes, dijo el portavoz militar Ronen Manelis ante la prensa. Se lanzaron además botellas incendiaras, explosivos y cometas con fuego contra territorio israelí. Incluso hubo intentos de secuestrar a soldados, detallaron los militares.
En las protestas masivas participaron unos 40 mil personas que se concentraron en 12 puntos a lo largo de la frontera entre Israel y la Franja de Gaza para intentar romperla. Manelis acusó a Hamas, la organización radical palestina que gobierna en la Franja de Gaza de intentar cometer atentados contra Israel bajo la excusa de las protestas pacíficas.
En las protestas también participaron muchas mujeres. Según el Ejército israelí, Hamas pagó 100 dólares a cada familia que participaba en las manifestaciones y obligó a participar a quienes no querían hacerlo, aseguró el portavoz. "Nadie ha conseguido cruzar la frontera".
Israel está preparado para seguir respondiendo a las protestas violentas en los próximos días, dijo Manelis. La violencia de hoy ha superado todo lo que se ha visto desde el inicio de las protestas el 30 de marzo, añadió.
Ese día los palestinos comenzaron la "Marcha del Retorno" para reclamar su derecho a volver a sus antiguas tierras, algo que les niega Israel. Desde entonces, los soldados israelíes abatieron a casi 80 palestinos e hirieron a miles.
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