Dr. Jaime Chalita Zarur | 13/05/2018 | 23:15
El populismo es la antítesis de la cultura del esfuerzo y el principal elemento para estar fuera de competitividad internacional para nuestro País. Es igualmente la fábrica de personas que sirve a quienes ilegítimamente representan al pueblo.
El trabajo personal es la fuente de todas y cada una de las riquezas, desde luego guiado por el intelecto bien educado: esta debería ser, la oportunidad de todos los mexicanos y no sólo de unos cuantos. Educar es el progreso de cualquier nación.
Advertido de que algunas fuentes de trabajo son legítimas, otras, van en contra la ley pero todas son fuente de ingresos, como comento, unas dentro de la ley, otras fuera. Desde luego lo que tendríamos que hacer, es generar oportunidades legales y legítima, para que las personas puedan accesar a una vida mejor.
El populismo está en todas partes, favorecido por las campañas políticas... todas, ninguna se salva. En el mundo parece que se regresa la historia y la libre empresa remite, parece que en el afán de ganar poder y dinero público, se promete lo que se sabe, no se cumplirá. Así, antes se prometía meter al calabozo a quienes se habían robado los recursos del pueblo pero, nunca nadie cumplió, por ello la impunidad.
Ahora se promete todo regalado, pero es con el dinero ajeno, con el dinero que debería servir a todos y no sólo a un sector. México no es pobre, es un País empobrecido y con el populismo va por el camino a crear más pobres pero, habrá, otra vez, casi las mismas familias mucho más ricas.
Este sistema está completamente rebasado, el día que las personas entendamos que no hay necesidad de limosnas electoreras y que si, en cambio, habría que exigir las oportunidades que los mexicanos deberían tener, entonces, esta Patria nuestra, cambiaría a ser una verdadera potencia económica y social, como debería haber sido desde siempre.
Ningún candidato lo ha expresado. Creo que si lo entienden pero, han entrado en alguna especie de competencia para regalar lo que no les corresponde. Adueñarse de lo ajeno no es correcto, disponer de lo mismo, tampoco, son actos de una persona que raya o, es autoritario y controlador del futuro de los demás.
La verdadera democracia tendría que haber llegado a nosotros pero, parece que no la queremos o, nos entorpecemos unos a otros con tal de sacar la mejor ventaja por encima de los demás y, esto le sirve enormemente a quienes compran conciencia de la gente en necesidad; lo pobres que padecen hambre o, los que padecen la ausencia de patrimonio.
Lucrar con las necesidades de los demás es inmoral, fuera de toda ética política y, social, porque en el lugar de ello, debería existir la oportunidad de tener la productividad del trabajo bien pagado y la generación de profesionales a través de la educación
Si hay una palabra importante en la vida, es equilibrios, que no es otra cosa que un estado en el que algo no cae de un lado ni de otro; tiene la proporción justa. La persecución del bien común genera una sociedad fuerte, equilibrada y sostenible, mínimos requisitos para vivir en paz y progresar.
Poco se habla, en estas campañas, de riqueza física para tener la fortaleza necesaria para el trabajo; del ejercicio profesional para tener acceso a mejores formas de vida; de la riqueza económica que asegura la independencia y control de la vida personal; de la fortaleza de las relaciones sociales, pues todos dependemos de los demás; igualmente poco o nada se habla del servicio a los demás y sus compromisos, generando crecimiento espiritual.
@jaimechalita
