En un comunicado, Ayatolá Ali Jamenei, lider supremo de Irán, expresó su simpatía con las familias de las víctimas y sus oraciones por la paz de los 60 pasajeros y seis tripulantes que viajaban a bordo del avión de la línea aérea Asseman Air, según un reporte de la agencia de noticias Mehr.
El avión, que cubría la ruta entre Teherán y la ciudad de Yasuj, se estrelló en una zona montañosa cercana a la ciudad de Semirom, en la central provincia de Isfahan, 50 minutos después del despegue y a unos 80 kilómetros de distancia del lugar de su destino.
"El fallecimiento de decenas de connacionales en el accidente aéreo llenó los corazones de gran peso y tristeza", indicó el máximo líder de la República Islámica.
El Ayatolá instó a las autoridades responsables que hagan todos los esfuerzos que requieran para recuperar los cuerpos de las víctimas del lugar del accidente y que tengan un entierro honorable.
Un oficial de la aerolínea Asseman Air indicó que el avión, un turbohélice bimotor ATR 72, se estrelló debido a la fuerte niebla y lluvia en la zona, condiciones que impedían el acceso a los servicios de rescate.
El portavoz de los Servicios de Emergencia de Irán, Mojtaba Khaledi, confirmó que un equipo de rescate había viajado al sitio del accidente por tierra y que estaba tratando de localizar los restos de la aeronave, ya que por ahora ningún helicóptero ha podido aterrizar en la zona.
"El clima es actualmente nublado y lluvioso y los rescatistas están buscando el avión, pero aún no lo han avistado. A pesar de las malas condiciones climáticas, los grupos de socorro continúan su búsqueda", subrayó.
Los controladores aéreos informaron por su parte que el avión desapareció de las pantallas del radar 50 minutos después de su despegue en el aeropuerto de Mehrabad de Teherán alrededor de las 08:00 horas locales (04:30 GMT).
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