Piratería no disminuye, se incrementa

Al escuchar la palabra piratería, nos remontamos al consumo de películas y discos clonados, artículos que son fáciles de encontrar en mercados y tianguis. Con la entrada de plataformas digitales como Netflix y Spotify, pareciera que la piratería ha disminuido pero reportes institucionales, revelan lo contrario.

El año pasado, la Procuraduría General de la República (PGR) anunció el decomiso de 14 mil películas y discos de música falsificada en San Luis Potosí.

La intervención ocurrió en la colonia El Saucito, donde se aseguraron 7 mil 100 videogramas y 7 mil 132 fonogramas. El material fue puesto a disposición del Ministerio Público de la Federación, donde se inició la carpeta de investigación.

La piratería no se reduce a la compra de dispositivos que permitan el consumo de entretenimiento, también la encontramos en otro tipo de artículos, según la investigación titulada “Piratería, entendiendo el mercado sombra en México”

¿Dónde encontrar piratería?

Los principales lugares donde se puede adquirir un producto pirata son los tianguis o mercados, vendedor ambulante, tiendas departamentales o de conveniencia, un amigo o conocido, el metro, catálogo o incluso por internet. En esta última opción las cosas se ofertan mediante páginas de Facebook, aludiendo a que el artículo es un “clon original”.

La piratería no sólo se manifiesta en los artículos tangibles, también se puede consumir intangiblemente, es decir, en las páginas ilegales de música, de contenido pornográfico, de películas, programas de computadora, entre otras.

¿La piratería es dañina?

De acuerdo a la UNESCO, la “piratería” abarca desde la reproducción hasta la distribución ilegal de copias no autorizadas de productos protegidos por el derecho de propiedad intelectual.

La piratería representa un daño para la salud debido a que no se conoce la procedencia del producto, sus ingredientes ni sus procesos de construcción.

A nivel local, las cámaras empresariales de San Luis Potosí opinan que el consumo desmedido de piratería lastima el tejido económico de la entidad.

Las empresas formales se enfrentan a la competencia desleal de los productores, que no pagan impuestos. El comercio de bienes falsificados se encuentra “estrechamente ligado con la producción de redes globales de crimen organizado”.

El consumo de piratería es una debilidad del Estado de Derecho y tiene un estrecho vínculo con la corrupción y/o la inseguridad a la que se enfrentan las empresas locales.

Los artículos más consumidos en el país

Música/CDs 68%

Películas/CVDs 62%

Ropa y accesorios (lentes, relojes, bolsas) 41%

Calzado 29%

Cosméticos/Lociones/Perfumes 25%

Productos eléctricos (focos, cables, extensiones) 22%

Baterías/Pilas 22%

Productos de limpieza (detergentes, jabón) 21%

Medicinas 17%

Software o programas de Computación 15%

Juguetes 15%

Productos de cuidado personal 13%

Celulares y accesorios 13%

Videojuegos 12%

Productos electrónicos (computadoras, tabletas, televisores) 12%

Libros 11%

Accesorios electrónicos (cartuchos de tinta y cargadores) 11%

Cigarros 6%

Bebidas alcohólicas 5%

Las principales razones de consumo

Por su precio 41%

Por su presentación o empaque 19%

Por su calidad 17%

Por diferencias en logotipo o marca 12%

Por el lugar de venta 10%

Otro 1%

Las principales percepciones de consumo son

Familias de bajos recursos pueden comprar cosas que antes no podían 52%

Todo el mundo lo hace 39%

Tiene efectos negativos para el país 36%

La piratería ayuda a que las empresas grandes no se enriquezcan 30%

A mí no me perjudica 25%

Tiene beneficios para mí 36%

Es ilegal pero no es grave 16%

No perjudica a nadie 16%