HA QUEDADO MUY CLARO DESDE hace un tiempo a la fecha que el servicio de transporte público en San Luis Potosí atravesaría una transición dolorosa y hasta difícil, tal vez para los propios usuarios, en aras de alcanzar la modernidad y tener al final del día el transporte público que se merecen los potosinos.
HOY SIGUE SIENDO LA PREGUNTA que prevalece en el aire, si verdaderamente este es el camino para tener el transporte público que uno se merece. La pregunta puede abrir un debate de resultados y también de avances, si quiere usted verlo desde esa manera, de lo que se ha podido cambiar con el objetivo de mejorar un servicio que prácticamente se mantenía en la anarquía, en la cual se venían denunciando desde el tráfico de influencias, el monopolio y latifundismo, todo menos el cabal cumplimiento de la ley del transporte.
POCO A POCO LOS ESFUERZOS canalizados en la problemática clara que era el llevar un servicio de calidad y “seguro”, cuyo reto aún sigue siendo mayúsculo, a la incorporación en San Luis Potosí de las tecnologías, como la implementación de cámaras de seguridad y una red de monitoreo, la nueva modalidad de recarga de tarifa de prepago, que vendría a solucionar problemas añejos que se daban entre el pasaje y los choferes del servicio y la obligatoriedad para la renovación del parque vehicular con condiciones óptimas e incluyentes para personas con discapacidad, si en breves renglones podríamos resumir un poco lo que se ha tratado de avanzar en este sentido, todavía estamos muy cortos en definir lo que falta por recorrer.
Y HOY AL FINAL DEL DÍA LA BOLA DE nieve que se vislumbraba podía ocurrir originada por la implementación de plataformas digitales para la prestación del servicio de transporte de alquiler, también conocida como UBER, que originaría un enfrentamiento “cantado” entre los trabajadores del volante en el servicio de taxi, y aquellos que decidieron hacerse socios de las plataformas y brindar un servicio que a la fecha no es del todo legal, ocurrió como ha ocurrido en otras partes del país y del mundo incluso, pues la competencia aunque genera calidad, no siempre es bienvenida, sobre todo si se rompen inercias de mal servicio, mediocridad y zona de confort para los concesionarios.
SIN EMBARGO LO QUE PARECÍA ser un callejón sin salida, después de largos meses de pláticas y gestiones, se modifica la ley y se entregan concesiones para el servicio de taxi a los verdaderos taxistas, se estipula que el servicio digital puede coexistir, siempre y cuando se den de alta en un padrón que debía controla la Secretaría de Comunicaciones y Transportes, cosa que no ocurrió, de ahí que sigan los operativos para detener a quien sea sorprendido brindando el servicio de Uber, que se ha vuelto lo más común para muchos ciudadanos.
ES PRECISAMENTE AHÍ DONDE podría residir el problema que hoy nos ocupa, pues el tiempo que se ha dejado pasar ha dado pie al surgimiento de mercenarios y paleros que se dicen a sí mismos trabajadores del transporte y ni siquiera lo son, como el caso de un mentado "Chema", que supuestamente maneja un centro de rehabilitación y de ahí recluta a los pandilleros que se dedican a golpear a los choferes de Uber, incluso poniendo en riesgo la integridad del pasaje.
DE AHÍ QUE LOS VERDADEROS taxistas han expresado su completa independencia de este personaje que, al parecer, se alquila y lleva a los paleros que sea necesario para escandalizar y derribar acuerdos. Así, de ese tamaño, al punto que se hace necesario fortalecer los esquemas de seguridad en protección de los usuarios.
POCO AFORTUNADO RESULTA QUE ahora, en tiempos de precampaña, los constructores de la Cmic se presten a descalificaciones con este perfil a través de sus líderes. Marco Antonio Uribe Ávila, quien vive a expensas de las cuotas de sus socios a pesar de que sólo les consigue obras millonarias a sus cuates, y de convenios leoninos con 30 ayuntamientos, a los que les impone el 15 por ciento del valor de cada licencia de construcción que expiden y el .1 por ciento por cada obra social.
SIN EMBARGO BUENO PARA criticar las obras del ayuntamiento capitalino, sin ver la ver “la viga” como dicen. La Cámara Mexicana de la Industria de la Construcción, capitulo San Luis, que se lleva a la bolsa más de 40 millones de pesos anuales a través de cuotas gremiales, de acuerdo a información hecha llegar a su servidor, amigo lector.
EN CONTRASTE, AL QUE LE ESTÁ yendo bien es al gobernador Juan Manuel Carreras López, cuando menos en el rubro del reconocimiento empresarial, al haber sido invitado al encuentro con líderes empresariales en Guadalajara, Jalisco, por parte de Grupo Financiero Value, y Carlos Bremmer, por el crecimiento económico que sin precedentes está viviendo la entidad.
OJALA Y SE MANTENGA A FIN DE emparejarnos con las entidades federativas que nos han dejado atrás.
HASTA LA PROXIMA