Jueves 14 de Noviembre de 2024 | San Luis Potosí, S.L.P.
local

2018, año del agua en SLP

Lilia Quevedo | Plano Informativo | 20/01/2018 | 01:03

Conflictos agrarios que han amenazado con cancelar la construcción de varias presas en San Luis Potosí se encuentran en vías de solución. Los problemas entre ejidatarios y autoridades han atrasado la consolidación de proyectos para la gestión del agua en la entidad pero este año el proceso está encaminado a su total solución.

Presas como La Maroma y Las Escobas son claro ejemplo de ello. Esta última, que fue uno de los principales compromisos en el inicio del gobierno municipal; no ha logrado concretarse.

Los pleitos legales entre gobiernos y las comunidades aledañas a Las Escobas, han puesto en riesgo la obra.

Casi listo, dictamen del TUA

Jesús Medina Salazar, titular de la Comisión Estatal del Agua (Cea), informó que en 30 a 45 días el Tribunal Unitario Agrario emitiría una definición sobre quiénes van a tener un reconocimiento pleno de los terrenos, esto definirá a quién pertenecen los ejidos proyectados para la construcción de este embalse.

SHCP no libera recursos por falta de posesión del terreno

Aunque ya existe el proyecto ejecutivo, no se ha logrado obtener el recurso por parte de la Secretaría de Hacienda.

"El problema es que al no poder acreditar la posesión del terreno o la ocupación plena, la Secretaría de Hacienda nos decía 'no podemos darte recurso, porque no tienes el terreno donde vas a construir la empresa' y además el terreno que va a ser inundado por las aguas de la presa".

El funcionario estatal consideró que para este año se puede resolver la situación y obtener el registro en cartera para la presa.

En Matehuala ya se resolvió el conflicto

La construcción del embalse La Maroma, que se construirá en el municipio de Matehuala, también tuvo problemas con los comuneros, los cuales ya desistieron de pelear "por su territorio".

El 15 de enero del 2017, ejidatarios de la comunidad de La Maroma presentaron el desistimiento del amparo promovido, recurso legal que imposibilitaba la construcción de la presa.

"Con la presentación de ese desistimiento, nosotros ya estamos en la libertad de comenzar con el proceso de licitación".

A medida que avanzaba el proyecto, la decisión del destino final del agua de La Maroma cambió de destinatario, al inicio de la administración federal se proyectó que el agua que se va a almacenar sería de uso agrícola, sin embargo Medina Salazar informó que la Comisión Nacional del Agua gestionó ante la Secretaría de Hacienda que su uso fuera público urbano.