Dr. Jaime Chalita Zarur | 05/01/2018 | 00:40
SE TERMINO 2017 Y CON ESTE espacio de tiempo se crean recuerdos, buenos o malos, pero se van quedando en la memoria. Un momento muy breve, quizá imperceptible e imaginario por el que cruzamos de un número a otro, pero quienes seguimos en este plano material nos deseamos beneficios mutuos de amor, paz, progreso, alegría, viajes, trabajo, salud y, mucho más.
¿QUÉ TANTO LO QUEREMOS Y deseamos, el que nos vaya bien a todos? Lo que pasó el año que terminó, delgada línea entre el pasado y lo que sucede en el presente, pero también, el próximo segundo calificado como el futuro, igualmente pronto se esfuma dejándolo en el pasado, recuerdos todos pero, las acciones que prolongan sus efectos nos pueden ayudar o maltratar, incluso hacer retroceder y lastimarnos.
LA CIUDADANÍA EN LO GENERAL no estamos exentos de cometer errores, y fundamentalmente lo hacemos en impulsos muy básicos. La impotencia de no seguir soportando las injusticias que se viven en un país como el nuestro, nos orilla muchas veces, en momentos de oportunidad para que exista justicia, a actuar en forma precipitada cometiendo errores, y por otro lado, en forma calculada, lo que a muchos les gusta practicar, como es el odioso protagonismo.
DURANTE EL AÑO QUE TERMINÓ, el 2017, muchas personas, mujeres y hombres, trabajaron como miembros del Consejo Ciudadano de Transparencia de San Luis Potosí (CCTSLP) para, en contra corriente de intereses, lograr colocar a tres personas, de las cinco necesarias, en la convocatoria del Congreso de nuestro Estado, para tal efecto y conformar el Comité Ciudadano Selector.
DEBO DE ACLARAR QUE verdaderamente, una vez que se había integrado el mencionado Comité Selector, varias personas de los integrantes del CCTSLP se dieron a la tarea de buscar y platicar con las personas encargadas de seleccionar a quienes se interesaron en participar, para formar la Comisión Ciudadana Anticorrupción.
DESPUÉS DE MUCHAS REUNIONES se llegó en un trabajo verdaderamente ciudadano, a conformar dos planillas: una de miembros numerarios y otra de miembros supernumerarios, con respeto de la equidad de género y conformada de tal manera que no fuera impugnable, pero también, con personas de todo el Estado.
LO QUE SUCEDIÓ DESPUÉS FUE, como está siendo, una pifia. Los acuerdos bajo la mesa por los mismos ciudadanos y quién sabe si hubo contubernio con algunas autoridades, dieron con el fracaso, hasta ahora, del avance que con mucho esfuerzo, dedicando tiempo, se había logrado de parte de los ciudadanos.
DESDE LUEGO LO HE COMENTADO muchas veces, igual que algunas otras personas. Sabemos que en el problema que vivimos de corrupción, impunidad y violencia, no solo está el sector público, también algunas personas en lo particular. Por ello México necesita ser re-fundado por patriotas, no por cuasi patriotas o patrioteros.
SURGIERON LOS PLEITOS, LAS diferencias, todo en torno a los intereses de algunos "ciudadanos" que hicieron exactamente lo que no se quería o deseaba, desde la Comisión Selectora. Hubiésemos querido tener una Comisión Ciudadana Anticorrupción totalmente incuestionable y, desde luego, sin caer en problemas de ser impugnable.
HOY, ESTA MULTICITADA COMISIÓN está debilitada y en el olvido oficial, con la primera presidente, renunciada. No está en el ánimo de las autoridades, tomarla en serio o de acudir a su convocatoria. Los ciudadanos responsables se han hecho daño unos a otros pero también nos han dañado.
ALGUNAS VOCES SE HAN ALZADO acusando unos a otros, todos mexicanos, resaltando algunas palabras y citándolas como las del año: "nadie hace nada" o "indiferencia". Las dos se incluyen en el exceso de egolatría de quienes las citan y el desconocimiento de los esfuerzos verdaderos de ciudadanos que buscan cambiar para bien, pero el cáncer llega lejos.
EXISTEN MUCHOS CIUDADANOS que en su lucha diaria hacen lo posible para ir resolviendo la problemática cotidiana personal, pero también abonar al trabajo honesto y exigente de la sociedad, para que las autoridades cumplan con su deber.
¿DE QUÉ SE TRATA SI NO? Cuando las personas, como existen muchas, bien intencionadas y apartadas del ego y lo mezquino, invierten o gastan su tiempo, como se quiera ver, en reunirse una y otra vez con personas que, asociadas a las intenciones de mejorar, aportan lo que saben y su tiempo para el beneficio común.
DECIR QUE "NADIE HACE NADA" es un exceso de protagonismo, es un insulto a las personas que trabajan en favor de la sociedad y aún con toda la dificultad oficial, hay que sumarle la envidia de otros. Señalar que se es indiferente, es un agravio al trabajo honesto de quienes desean un México honesto, escribiendo su nueva historia.
DE HACER LAS COSAS BIEN, ES DE lo que se debe de tratar. La renuncia de la Comisión Selectora es exigible para no seguir dañando más a la sociedad.
Feliz inicio de año 2018
@jaimechalita