Migrantes, un abrazo de 3 minutos en la frontera

Desde el año 2013, familias mexicanas tienen la posibilidad de reencontrarse con sus migrantes radicados en Estados Unidos, quienes por su condición de ilegales no pueden regresar a México. Son solamente 3 minutos, donde entre alegría, abrazos y llanto, los mexicanos pueden reencontrarse con los suyos en el tercer fin de semana de noviembre.

Cada año, autoridades migratorias estadounidenses permiten abrir las puertas metálicas para que las familias se reencuentren y en este 2017, alrededor de 12 familias mexicanas acudieron a la frontera entre nuestro país y Estados Unidos, entre ellas algunas pertenecientes a municipios de San Luis Potosí, que después de varios años pudieron abrazarse, gracias a la iniciativa del grupo Ángeles de la Frontera.

Momentos antes de que se abran las puertas que dividen a ambos países, tanto los migrantes como los familiares se sitúan a unos metros de las vallas, se escucha la indicación para que estas sean abiertas y los bandos corren a encontrarse por solo 180 segundos, ese tiempo se ha convertido en un tesoro de las familias potosinas que esta semana acudieron a El Faro, en las playas de Tijuana.

En el marco de la celebración del Día Internacional del Niño, 20 de noviembre, algunos pequeños pudieron abrazar a sus padres gracias a las gestiones realizadas por Enrique Morones, fundador y directivo de Ángeles de la Frontera.

Las familias provenientes de Estados Unidos que participaron, llegaron de ciudades como San José, Stanford, Escondido y Orange, mientras que del lado de México, eran oriundas de localidades como Culiacán, Mexicali, Monterrey y los estados de Zacatecas, San Luis Potosí, Guerrero y Michoacán.

De acuerdo a los datos del último Censo de Población y Vivienda del Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi), los municipios del estado con más alto índice de intensidad migratoria hacia Estados Unidos son: Salinas, en primer lugar, y que ocupa la posición número 40 en el índice nacional. Le siguen Lagunillas, San Ciro de Acosta, San Nicolás Tolentino, Villa Juárez, Alaquines, Ciudad Fernández, Rayón, Tierra Nueva y Villa de Ramos.

Sin embargo, mantenerse de condición ilegal en Estados Unidos se ha vuelto complicado. Si bien las políticas antiinmigrantes del presidente republicano Donald Trump no han enviado tantos potosinos como el de Barack Obama, hasta agosto último reporte del Instituto Nacional de Migración reportó que de enero a agosto del presente año, 3 mil 531 migrantes potosinos -3 mil 410 hombres y 121 mujeres- han sido deportados de Estados Unidos.

Arzobispo invitó a ser empáticos con los migrantes

Dejar la soberbia, el egoísmo y hacer uso de la empatía por los más necesitados, es la acción clave en estos tiempos difíciles, dijo Jesús Carlos Cabrero Romero, Arzobispo de San Luis Potosí.

En su publicación dominical, en el periódico católico "La Red", el prelado externó que es necesario llenarse de espíritu de pobreza, y pensar al humano como una criatura limitada y pecadora.

"La solidaridad de muchas familias potosinas hacia la comunidad migrante ha permitido que nuestros hermanos sientan el calor de amor que rompe esa tristeza".

Bajas temperaturas desanimarán a migrantes

Debido a las bajas temperaturas, el flujo de migrantes bajará hasta en un 40 por ciento, señaló Rolando Maldonado Salas, director de la Casa del Migrante en San Luis Potosí.

El promedio mensual de migrantes que pasan por la capital potosina es de 500 viajeros procedentes de Guatemala, Honduras y el Salvador.

Maldonado señaló que la presencia de familias es constante: "Tenemos tres familias con niños pequeños, con niños de tres años, y también mujeres embarazadas".