Ante omisión de autoridades, solo queda el autocuidado: mujeres

San Luis Potosí, SLP.- El acoso callejero, la violencia en todas sus manifestaciones, agresiones sexuales, la transgresión de la seguridad femenina en espacios públicos y privados, desapariciones forzadas y feminicidios, forman parte de las amenazas que cotidianamente las mujeres tienen que enfrentar.

Las Testigas de La Maltos, la Red de Potosinas Feministas y Vulvasónicas Batucada Feminista, asociaciones civiles en pro de la seguridad de las mujeres, coincidieron que San Luis Potosí necesita medidas urgentes y concretas para garantizar protección.

“Un motivo fundamental es la minimización del problema, la revictimización de las mujeres afectadas, la evasión o no conformación de expedientes e investigaciones judiciales y por ende la nula administración y aplicación de justicia […]con una alerta de género que no ha servido para capacitar a los cuerpos policíacos, ni a los funcionarios, el gobierno estatal y municipal tampoco han trabajado en la mejora de servicios de alumbrado público, vigilancia en las calles, avenidas y colonias que son principal foco de acoso, violencia feminicida y desapariciones”, manifestó una de las integrantes de Vulvasónicas.

Las activistas externaron que ante la omisión de las autoridades, únicamente queda el autocuidado, la autodefensa y el llamado a la sociedad en su conjunto.

De acuerdo a estas organizaciones, se plantean estas medidas para generar de manera latente mecanismos de defensa sin la revictimización:

§  Declaración oportuna de la Alerta Amber, ya que en SLP se activa a las 72 horas de que se llevó a cabo la desaparición.

§  Gestionar la búsqueda y localización de niñas y mujeres desaparecidas.

§  Capacitación a funcionarios de gobierno en perspectiva de género y derechos humanos (campañas permanentes).

§  Capacitación a corporaciones policíacas estatales y municipales en perspectiva de género y derechos humanos (campañas permanentes).

§  Capacitación a los medios de comunicación en perspectiva de género y derechos humanos (campañas permanentes).

§  Capacitación a la sociedad civil en perspectiva de género y derechos humanos (campañas permanentes).

§  Elaboración de protocolos de actuación y reacción ciudadana y policial.

§  Creación de agrupaciones especializadas en género y de reacción inmediata.

§  Creación de consejos de especialistas, académicos y de investigación en asuntos de violencia de género, en la entidad en busca de la aplicación de derechos humanos.

§  Creación de un banco de datos de violencia contra la mujer para la correcta generación de políticas públicas de prevención y atención a mujeres y niñas.

§  Vigilancia por mujeres policía en transporte público.

§  Vigilancia por mujeres policía en transportes de personal.

§  Vigilancia por mujeres policía en rutas de transbordo de transporte público y zonas peatonales.

§  Recuperación de espacios públicos.

§  Sancionar el acoso callejero.

§  Gestión y organización ciudadana de transporte colectivo exclusivo para mujeres y niños.

§  Chats y grupos de whats app para el monitoreo del desplazamiento, trayecto y llegada de las mujeres en zonas y horarios de riesgo.

“La culpa es un método de control político y económico para establecer roles, olvidar la condición humana, dañar la autopercepción y limitar a las mujeres, donde otros deciden que deben pensar, decir, sentir y hacer”, concluyeron.