Nos resistimos a reconocer que San Luis Potosí es un lugar de violencia, de extorsiones y corrupción, lamentó Juan Jesús Priego Rivera, vocero de la Arquidiócesis en San Luis Potosí.
Priego Rivera consideró que en ocasiones es necesaria la intervención espiritual como la oración, el ayuno e incluso el exorcismo, a fin de mejorar el entorno social.
A dos años del magno exorcismo realizado en la Catedral Metropolitana, en el que participaron además de sacerdotes y el arzobispo potosinos, clérigos mexicanos y un destacado exorcista español, se cuestionó al vocero Priego Rivera sobre los efectos que ha tenido este ritual católico en la ciudad y el Estado.
"Las obras espirituales obran invisiblemente, entonces obran a través de la gracia y no pueden ser cuantificadas, solo Dios sabe el efecto que haya tenido este exorcismo, pero sí podemos decir que en estos últimos dos años ha habido mayor conciencia social de los potosinos, una lucha más abierta contra la corrupción", señaló convencido Priego Rivera.
El magno exorcismo realizado en 2015 en la Catedral Metropolitana potosina tuvo como motivación aminorar los casos de aborto y los acontecimiento violentos en la entidad, ya que por ese tiempo se analizaba en el Congreso del Estado la iniciativa para despenalizar el aborto y los casos de violencia estaban en aumento.
Aunque no dio una cifra certera, Juan Jesús Priego Rivera consideró que sí han ocurrido cosas inéditas en la entidad a partir del magno exorcismo, como el destape de actos de corrupción generados en grupos políticos, o el despertar de la conciencia cívica de los potosinos que han decidido involucrarse nuevamente en la vida política de la entidad.
Priego Rivera consideró que es necesario luchar contra la "lacra social" que se ha alojado en la entidad.
Expuso que el manejo político potosino ha generado resentimiento entre la población, y puso como ejemplo el escándalo generado por los casi 500 mil pesos que recibirá cada uno de los 27 diputados del Congreso del Estado, por concepto de aguinaldo en el mes de diciembre.
"Si tu bendices la casa pero los moradores no están en paz, pues no va haber paz, por más que tu bendigas", reconoció el vocero de la Iglesia Católica potosina.
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