Miguel Ángel Guerrero | 27/10/2017 | 13:02
Con menos problemas de lo que se pensaba, finalmente el congreso del estado aprobó la designación del procurador de justicia Federico Garza Herrera como el nuevo, fiscal del estado confirmando lo que hace dos semanas señalábamos en este espacio respecto de que la fiscalía ya tenía prácticamente definido al primero que ocuparía ese cargo por lo que citamos el nombre del que ya fue elegido, lo que lo obligará a multiplicar esfuerzos para el adecuado desempeño de ambas responsabilidades.
De por sí, el puesto de procurador de justicia es uno de los más complicados de la administración estatal, ahora con la pesada tarea que implicará el quehacer de la fiscalía, la circunstancia que enfrenta Federico, sin duda, no es absolutamente nada envidiable pues ahora, con mayor razón, estará bajo la lupa ciudadana absolutamente certera en eso de encontrar las fallas y errores de los funcionarios públicos para lo que FGH ofrecerá doble flanco de búsqueda de los mismos por sus dos chambas.
Y, aunque los que lo acompañaron en la terna eran buenas opciones fue lógico que los cabildeos entre los diputados realizados por el líder de la bancada priista Fernando Chávez Méndez se dirigieran a impulsar la propuesta con la que evidentemente, simpatizaba el primer tricolor del estado, el gobernador Juan Manuel Carreras López quien ha depositado toda su confianza en Federico para el trabajo de combatir la delincuencia y procurar eficientemente justicia.
Es cierto que, como todos, Garza Herrera no es monedita de oro y que los grupos empeñados en impulsar a uno de los suyos a la fiscalía no dejarán de objetar su nombramiento y aún de cuestionar su trabajo como procurador en aras de favorecer a sus cuates queda claro que, a partir de su nombramiento, Federico deberá ser uno de los funcionarios que cuente con todo el apoyo del aparato gubernamental a fin de que saque adelante su nueva chamba tanto como la que ya tenía pues así le conviene a su jefe y San Luis Potosí se lo exige.
En ese tenor el nuevo fiscal tendrá para demostrar de qué está hecho el poder llamar a cuentas al diputado panista Enrique Flores luego de que su desafuero está casi cocinado y no habrá impedimentos para que sea sancionado por su participación en el escándalo de las extorsiones a alcaldes para blanquear sus cuentas.
Así entonces, JMCL ha consumado el proyecto de impulsar a alguien de su confianza a la fiscalía general lo que todos los potosinos esperan que sea un acierto por el bien de todos mediante una operación política con la que no se pisoteó a nadie ni se pasó por encima de alguien con mayores merecimientos, por lo que no queda más que desearle suerte por el bien de SLP y de los potosinos.
CABOS SUELTOS
El titular de la seduvop Leopoldo Stevens Amaro no tarda en ser el centro de un colosal escándalo como consecuencia del tráfico de influencias para favorecer con jugosos contratos las constructoras de su hijo y de sus amigos como Carlos Fonseca señalado como el que “mece la cuna” en la dependencia para amañar licitaciones y desviar los fallos a su conveniencia a lo que el gobernador Carreras debería voltear pues no tarda en estallar la bomba que se activará desde una relevante oficina federal que ya tiene en la mira a Stevens y compañía…