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Conductas que pueden dañar tu salud

Agencia | 12/10/2017 | 12:34

Aunque no nos demos cuenta, a diario llevamos adelante determinados hábitos que consideramos de lo más naturales, como sentarnos varias horas frente a la computadora, comernos las uñas o utilizar zapatos incómodos. Sin embargo, resulta importante saber que este tipo de conductas (por insignificantes que parezcan) realmente pueden dañar nuestra salud.

1. Estar sentado durante mucho tiempo
Hoy día podríamos afirmar que el estilo de vida imperante es el sedentario. Ya no tenemos que trabajar la tierra ni salir a cazar para conseguir alimento y ya no nos movemos tanto para comunicarnos con otras personas.

Y, por supuesto, tener acceso al alimento y poder comunicarnos a cualquier distancia con casi todo el mundo tiene sus ventajas pero también debe despertar una llamada de atención con respecto a nuestro cuerpo.

En efecto, la falta de ejercicio físico puede provocar exceso de peso, diabetes, presión arterial alta e incluso problemas graves del corazón. Está claro que trabajar o estudiar varias horas seguidas en la misma posición no ayuda a disminuir las probabilidades de padecerlas.

Se ha demostrado, por ejemplo, que caminar cada tanto puede ayudar a reducir los efectos negativos. Intenta entonces caminar y pararte todo lo que puedas y no olvides incluir una rutina de ejercicio físico en tu semana.

2. Comerte las uñas
Este hábito está estrechamente ligado con el estrés y el nerviosismo. Comerse las uñas puede provocar daños en las uñas en sí pero también provocar infecciones en la piel.

Además existe una probabilidad alta de que al llevarnos las uñas a la boca se introduzcan gérmenes en el cuerpo que generen infecciones respiratorias.

Este hábito también puede generar daños en el esmalte de los dientes o incluso puede provocar quebraduras. Si eres de los que tiende a comerse las uñas con frecuencia piensa qué es lo que te genera ansiedad e intenta destrabar el origen de ese nerviosismo.

3. No tener una rutina de descanso
Mirar televisión o quedarnos hipnotizados con una serie hasta tarde e incluso beber alcohol antes de dormir son de esos hábitos que interfieren en nuestro descanso. Fumar tabaco y realizar actividad física en exceso en las últimas horas del día también pueden perjudicar la calidad del sueño.

La falta de un descanso propicio produce molestias físicas y emocionales al día siguiente como la fatiga y el mal humor.  La carencia de sueño puede incluso provocar a largo plazo problemas cardíacos y cognitivos. Por fortuna existen formas de modificar este hábito y de poder concretar una rutina de descanso que garantice un sueño profundo y reparador.

4.  No lavarte los dientes y olvidarte del hilo dental
Muchas veces nos sentimos cansados antes de irnos a dormir y nos olvidamos de pasarnos el hilo dental o incluso dejamos el lavado de dientes para el día siguiente. Quizá por las mañanas tampoco encuentres un momento para hacerlo.

Pues resulta que olvidarse de utilizarlo y obviar el lavado de la dentadura puede ser más grave de lo que imaginas. Ambas conductas, si se convierten en un hábito, aumentan el riesgo de padecer problemas bucales como el sarro, las caries y el desgaste del esmalte.

Las bacterias que se alojan en los dientes y en las encías son las responsables de estas consecuencias. Mejor recuerda lavarte los dientes después de cada comida y no olvides pasar el hilo dental a diario.

5. Estar frente a una computadora todo el día

Ya sea por estudio, trabajo u ocio (o los tres factores combinados) la mayoría de las personas pasan demasiado tiempo de sus vidas frente a la computadora. Se ha comprobado que pasar largas horas frente a este dispositivo tecnológico aumenta las probabilidades de sufrir afecciones visuales severas como pérdida de visión y daños en la retina. Procura entonces descansar la vista cada 20 minutos y respeta una distancia prudencial entre tus ojos y la pantalla.