Hasta para los que no son aficionados al futbol, ayer fue uno de esos días que merecen festejarse por haber enmarcado la decisión formal de los altos directivos y accionistas del equipo español Atlético de Madrid de respaldar el ambicioso proyecto de hacer su filial al equipo local de la división de ascenso, con lo que se concreta el regreso del futbol profesional a la capital potosina.
Luego de que desde la mañana apareció en los medios el resultado de la junta general de accionistas de la institución ibérica en ese sentido, la noticia se convirtió en el centro de la mayor parte de las pláticas en mesas de cafés, los círculos empresariales y, por supuesto, en los gubernamentales con la coincidencia de que en todas las conversaciones el hecho se comentaba en tono de festejo, hasta, decíamos, por los que no son aficionados al espectáculo futbolero, en virtud de que constituía un hecho que marca el principio de una nueva época en la vida potosina, por su vinculación con un club de reconocida clase y prestigio mundiales.
Naturalmente el ambiente de festejo fue trasladado a las redes sociales, donde cientos de usuarios empezaron a manifestar su identificación y simpatía con los colores del rayado equipo madrileño a los que, sin duda, no tardarán en sumarse los miles de potosinos de ascendencia española, de la que hacen alarde en cuanto tienen la oportunidad de hacerlo, lo mismo hablando con un cierto acento ibérico que degustando un buen puro en las corridas de toros, que expresando su admiración por el baile flamenco, como muchos potosinos españolizados lo hacían como asiduos concurrentes al bar “Gitanerías” de la capital del país, donde muy seguido le daban gusto a las palmas para acompañar el ritmo de las bailaoras y sentirse como en la madre patria.
Es de hacer notar que en la ola de conversaciones en torno al tema casi nadie regateaba el reconocimiento al Payán, como mucha gente común se refiere a don Jacobo de dicho apellido, por haberse salido con la suya al traer a San Luis el proyecto de ese poderoso club de España que incluye una escuela de futbol para promover el deporte entre los jóvenes potosinos, de los que podría surgir un talento deportivo capaz de ser llevado al equipo español.
Así entonces, el viernes fue un día especial al difundirse la buena nueva de que ya no hay obstáculos a la vista que puedan impedir la alianza con el Atleti y, con ello, el regreso del futbol profesional al estadio Alfonso Lastras que será la sede local del conjunto potosino que se quiere llevar en una o dos temporadas a la primera división mexicana, pues está previsto traer refuerzos del Atlético para alcanzar pronto ese objetivo. De cualquier modo el viernes se vivió en la ciudad con un inocultable aire de festejo por una noticia alejada de tragedias, de notas rojas y de los infaltables presagios pesimistas que, afortunadamente, pasaron a segundo término.
CABOS SUELTOS
La clase empresarial asistió en pleno al anuncio de que San Luis Potosí será sede de la cumbre de negocios en su edición 2017, allá por el mes de octubre, como hace un buen tiempo no se le veía, lo que indica el tono y nivel de relaciones que llevan con el gobernador Juan Manuel Carreras López, con lo que envían a los potosinos el mensaje de que están para jalar parejo en la tarea de sacar adelante al estado de los problemas que enfrenta, pues además de que estuvieron los reales capitanes del gremio empresarial, también asistieron los presidentes de los organismos que los agrupan como para que no quedaran dudas de esa intención.
