Durante la campaña presidencial de los Estados Unidos, científicos y directivos de grandes empresas tecnológicas se pronunciaron en contra de votar a favor del candidato republicano, Donald Trump, por varias razones concernientes a la ciencia y tecnología. Sin embargo, ese llamado de poco sirvió pues los estadounidenses eligieron a Trump para ser su cuadragésimo quinto presidente de su nación.
Pero, ¿por qué directivos de compañías tecnológicas no apoyaron a Donald Trump? El ahora presidente electo de los Estados Unidos está -o durante su campaña electoral dijo estar- en contra del internet abierto, quiere apagar algunas partes de la red para que extremistas islámicos no tengan acceso, lo cual, a mi me parece bien, pero surgen preguntas: ¿cómo? ¿cómo podrá hacerlo sin perjudicar a una mayoría de población que utiliza el internet para uso personal y profesional?
Durante la pelea entre Apple y el FBI por un iPhone de uno de los terroristas de San Bernardino, para que se permitiera el acceso a la institución de investigación criminal a información privada del dispositivo, negándose desde luego la empresa Apple a permitirlo por su política de respeto a la privacidad de los usuarios, Trump llamó a un boicot contra Apple, y fue aún más lejos en su berrinche al declarar que usaría exclusivamente un teléfono de Samsung hasta que la empresa de Cupertino cediera a la petición del FBI. Esa postura hace suponer que como presidente estará de lado de cualquier orden judicial y petición de acceso a información privada bajo el trillado pretexto de que “hay un riesgo para la seguridad nacional”. Por cierto, ¿qué hubiera pasado si al candidato republicano o a alguno de sus familiares le hubiera explotado un Galaxy Note 7? Sí, Samsung y Surcorea hubieran sido blanco de sus ataques verbales.
Trump quiere reforzar el Cibercomando de Estados Unidos, la unidad del ejército que dirige las operaciones de defensa de las redes informáticas de los ciberataques. Su propuesta de campaña va encaminada a desarrollar las ciber capacidades ofensivas necesarias para impedir los ataques a entidades gubernamentales y no gubernamentales, y responder de manera apropiada cuando así se determine.
El republicano quiere también que Estados Unidos se fortalezca como polo industrial tecnológico. Ha dicho por ejemplo, que Apple "debería comenzar a construir sus malditas computadoras y cosas en este país, en vez de hacerlo en otros países", así lo dijo. Por eso, bajo esa misma mentalidad nacionalista, se opone a que Nissan establezca una planta armadora en San Luis Potosí, México. Por supuesto, Tim Cook, CEO de Apple, no está de acuerdo. Y es que, de fabricar los equipos en tierra estadounidense, aumentarían los costos, que al final, los pagaría el consumidor.
Veremos cómo gira el mundo IT en la administración de Trump. Espero no sea un gobernante "blocker" de la tecnología, aunque yo no lo veo así, sabe y entiende las ventajas de las tecnologías de la información y comunicación, tan es así que ha hecho propuestas de restricción y fortalecimiento, y como estadounidense desea que los dispositivos se fabriquen al 100 por ciento en su país. Pero demos tiempo al tiempo.
Nuevo videojuego
En recientes días, en el App Store y en Google Play se lanzó el videojuego free-to-Play: "The Wave. Aventura de surf", un pequeño tributo al surf, de apasionados al surf para apasionados al surf, para vivir una mini aventura única a través de divertidas olas. En The Wave encontramos un runner de surf en 2D de estética cartoon, ideado para el público casual. El juego es corto, endless y cuenta con más de treinta escenas diferentes que se combinan entre sí con un algoritmo para mantener la diversión. Pero como en la mayoría de los videojuegos, encontramos también compras integradas opcionales como personajes e invencibilidad.
Busque "The Wave. Aventura de surf" en el App Store o Google Play y descarguelo en su dispositivo de manera gratuita.
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