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Sin otro ánimo más que el de apuntar lo que está a la vista de todos, no deja de sorprender a los potosinos el intenso ritmo de trabajo que viene desarrollando la presidenta del sistema DIF Lorena Valle de Carreras en la aplicación de las políticas públicas de asistencia social a cargo de la también primera dama del estado.

Como casi diariamente lo consignan lo medios de comunicación formales tanto como las redes sociales cuando podría imitar a muchas de sus antecesoras y quedarse en casa descansar sin necesidad de someterse al intenso trajín de actividades que lleva a cabo.

No es un secreto que varias anteriores presidentas del DIF estatal duraban largos periodos sin presentarse a sus oficinas y a dejar en manos de sus colaboradores la tarea de hacer como que se hacía algo pero sin dejar de cobrar puntualmente sus jugosos salarios por lo que muy raramente se les podía ver fuera de las instalaciones.

Asimismo la gente del interior del estado las tenía como los cometas que muy de vez en cuando pasaban por sus municipios en virtud de que por angas o por mangas desdeñaban acompañar a sus señores esposos, los gobernadores en las giras de trabajo fuera de la capital o porque la edad ya no les permitían esfuerzos de ese tamaño en un contrate con lo que hace la esposa del mandatario estatal que lo acompaña en casi todos los viajes que hace por los 58 municipalidades ya sea para iniciar o para entregar obras.

En lo que respecta del estricto ámbito de su competencia doña Lorena casi no deja día sin que cumpla actividades de carácter social en apoyo de los sectores vulnerables como lo refleja el notable incremento en el número de niños que son beneficiados con desayunos escolares.

Otro cosa importante que ha hecho la primera dama ha consistido en no dar lugar a habladurías ni aún entre sus colaboradores en el sentido de que tiene protegidos en la dependencia que disfrutan de privilegios inmerecidos o que les da luz verde para hacer negocios de dudosa transparencia como en el pasado  lamentablemente, tantas veces ocurrió.

Y si de trabajar directamente se trata Lorena Valle ha puesto la muestra a los titulares de las dependencias estatales poniendo manos a la obra, como lo hizo al empuñar la pala y el pico para reforestar la zona verde del asilo Nicolás Aguilar o al acudir personalmente a arrancar la campaña “yo sí tengo mi nombre” para que los niños desde que nacen cuenten con su acta de nacimiento ritmo de trabajo que da una idea de la fuerte condición mental y física que guarda la primera dama para hacer frente a su circunstancia de lo que muchas, si no es que la mayoría, de las que pasaron por ese puesto no podían ufanarse en su tiempo por cosas de la edad o por la alergia a hacer esfuerzos de ese tamaño.

CABOS SUELTOS

Sería bueno que el titular de la ASE Pepechuy Martínez Loredo suelte los nombres de los que se le han apersonado para pedirle dinero a cambio de dejar de atacarlo…