Sábado 20 de Abril de 2024 | San Luis Potosí, S.L.P.

Espacio de reflexión

Jaime Cahlita Zarur | 29/08/2016 | 23:40

En un mundo globalizado y con la velocidad que se vive, muy semejante a la que, con rapidez nos llegan los acontecimientos del planeta, ya sean positivos o negativos y, que en la valoración individual, después de, espero, analizar lo congruente o incongruente de la información, podamos formar una opinión de la que aprendimos,  al leer.
 
En San Luis Potosí, han ocurrido, como en todos lados de la vida social de mundo, acontecimientos muy importantes en nuestro entorno cercano que nos afectan de manera positiva o negativa pero, también en el contexto Mundial y Nacional.
 
Los problemas globales, no terminan y van generando problemas sociales, económicos y, hasta de moral y ética; la riqueza mundial se polariza y, México no es el único país con una desigualdad social que abruma pero, desde leugo, nuestro Estado y Municipios no escapan a esta globalización que todo lo envuelve.
 
Con una moneda muy depreciada y, con recomendaciones en la forma de endeudarse para México, ya diferentes calificadoras, ha alertado el riesgo para nuestro País en inversión. No sólo eso, entre mucho, la indisciplina del gasto corriente, la falta de trasparencia y rendición de cuentas y, además, la polarización de Oaxaca, Chiapas, Guerrero y Michoacán que, junto a la impopularidad del Presidente Peña, han generado inconformidad en la sociedad.
 
Por lo mismo, se nos ha puesto en riesgo de caer en ingobernabilidad de nuestro País, a través de una crisis política, la misma que querrán aprovechar, quienes se interesan en ganar las elecciones federales del 2018, aún a costa del daño que se pueda ocasionar a este nuestro México. 
 
Los peligros de ingobernabilidad, están presente y, no nos conviene seguir el juego de la desaparición de los poderes, como lo han propuesto algunos, a tal grado que, caeríamos en el desprestigio de por sí, ya existente, en el mercado globalizado recibiendo efectos más negativos de los que ya se viven pero, desde leugo, afectando a las clases más desprotegidas y, como ha sucedido en muchos casos, favoreciendo a los dueños de capitales importantes: unos cuantos. 
 
Lo anterior no quiere decir que hay que perdonar y olvidar. Se nos dan dos efectos: Uno, el que México deben de ser un País de leyes pero, estas, están hechas con ventaja a quienes administran públicamente pero, son las que tenemos. Dos, a través de estas leyes se han creado Instituciones que deberían garantizar la vida social en orden, lastimosamente,  manipuladas en favor de intereses, desde el poder de cualquier nivel y, se propicia la división de la ciudadanía, fraccionándola en intereses diversos pues, al no obtener fundadamente, justicia, llega la confrontación. 
 
Como estarán las cosas que, en cuanto a las instituciones legales, que rigen la vida gregaria en nuestro País, pues cuando un juez federal, le concede un amparo a Victoria Labastida y a varios de sus colaboradores, dejando sin efecto el auto de formal prision, en contra de ellos, de inmediato se desgarraron las vestiduras los interesados en ver rodar cabezas, por el simple hecho de ser adversarios políticos pero, sin importar la verdadera acreditación de delitos. Es decir ver sangre por el solo hecho de ello, es barbarie, apartada de la vía legal que se supondría teníamos depositada en instituciones al servicio de la justicia.
 
La verdad jurídica esta plasmada y como siempre hemos comentado, debe prevalecer las instituciones, hoy debilitadas pero, son las que existen y si hay inconformidad, debería  ser plantearla, no en los medios y si, en los juzgados de la materia. 
 
Por un lado, vemos las explicaciones en los círculos de las administraciones públicas, las mismas encarnadas en los responsables de servirnos, invitándonos a confiar en estas mismas instituciones, pero por otro, se litiga en los medios la descalificación de estas mismas instituciones y se publican en los diferentes medios, versiones de conveniencia, como el de  culpar a los anteriores y, como ejemplo entre muchos, se nos dice que no hay recursos pero, por otro lado, vemos las cantidades que se gastan en algunos rubros sin dejarlos claros y, menos los de la  asistencia social, los cuales dejan más dudas que respuestas.
 
La población queda indefensa, ante las disparejas acusaciones sin saber de verdad quien o quienes son inocentes o culpables. Esta ha sido la historia de nuestro Estado, de nuestro País. 
 
Apostar al fortalecimiento de nuestras instituciones y, exigir a los encargados de aplicar la justicia, sin intereses, es el camino. Mucho se ha dañado la vida social de México, con corruptos que viven, paradójicamente, de dañar a la sociedad cometiendo injusticias. 
 
jaimechalita@yahoo.com

@jaimechalita.