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Punto de Vista

Pedro Félix Gutiérrez Turrubiartes | 23/06/2016 | 02:00

Con la privatización de ferrocarriles nacionales de México, los trenistas se descarrilan. Así reza el título de un trabajo que circulo a partir de 1977, de ediciones “el petardo”, en impresión mimeográfica, que Alberto Gallegos, líder ferrocarrilero me regalo como testimonio de nuestra amistad como un código secreto.
 
Hoy que su prolongada enfermedad  lo mantiene postrado, al cuidado de sus hijas y frente a los conmovedores retos de la hora, recuerdo que él nació en Oaxaca, en Ixtepec. Tierra zapoteca en el istmo de Tehuantepec. Cuya conexión por ferrocarril entre salina cruz y Coatzacoalcos-Ahí se trasladó su familia- atrajo, a libaneses, rusos, franceses, árabes e iraquíes.
 
“Gallegitos”,- como se le conoce- entró a trabajar al sistema ferroviario por su papá, como muchos otros que era trabajador de transportes y ya más joven se casó el 23 de diciembre de 1961 en Juchitán, Oaxaca Co María Cruz con quién procreo seis hijos, cuatro mujeres y dos hombres. Todos profesionistas ya.
 
La lucha mi pedro-dice con énfasis y energía- ha sido muy larga en nuestro país, “México sigue andando a gatas”, mi vida político sindical la inicié en el viejo partido socialista de los trabajadores, el PST.
 
Ahí conocí a”los chuchos”, a Jesús Ortega, a Carlos Navarrete, a memo Andrade, a Tomás Correa Y a Graco Ramírez. Y a otros estudiantes de la izquierda Universitaria. Yo no me fui al PRD con ellos- me espere- me quede con Rafael Talamantes, le fui fiel.
 
El partido me envió a la escuela de cuadros, así me formé en la lucha, eso no cambia nunca.
 
He conocido a muchos políticos, de diferentes colores todos me invitan a participar, pero “igual que México, los trabajadores seguimos a gatas”. El fondo de pensiones de jubilaciones ahora que el FFCC se privatizó nos o han querido robar. Estamos demandando al líder nacional de un sindicato que ya no existe y le vamos a ganar dice con emocionada y firme voz.
 
Mira este ejemplo: “el proceso de privatización de nuestra industria significó l entrega de tan vital y barato medio de transporte a las empresas americanas. Ello representa un retroceso histórico de 100 años. Y este proceso ya lo vivieron los trabajadores gringos del FFCC, quienes en aquellos años se conflictuaron entre las empresas ferroviarias y los sindicatos de trenistas en USA. Quienes pretendían una drástica reducción de personal.
¿Porque?, porque el derecho se ha ido quedando rezagado a la zaga de los avances tecnológicos.
 
Cuando el papá de Jesús Ortega que era llamador de tripulación del tren allá en Aguascalientes iba al domicilio de cada quién solo llevaba “una libretita” y ahí dejaba mensaje, “te toca salir en el tren numero tantos a tales  horas”, maquinistas, garroteros sabían de la salida de patio y de ahí al camino de hierro.
 
Igual que nosotros los trabajadores gringos perdieron con la dieselización que sustituyó a las máquinas de vapor. Dónde por ejemplo el fogonero ya no tiene ningún fuego por alimentar ni caldera que atender.
 
Esto reclamaba las empresas gringas a sus trabajadores, el exceso de mano de obra que perjudica la eficiencia y la eficacia del servicio y la producción generando pérdidas. El presidente de la hermandad de maquinistas y fogoneros de más de 200mil trabajadores reclamó esto. “la falacia del exceso de trabajadores en el sistema “.
 
Pero los avances dela tecnología y la ciencia en la conducción de un tren obliga a esto. Mientras los contratos colectivos de trabajo hechos años antes en otras condiciones mantiene al trabajador en su sitio. Esto es “el derecho obsoleto”.
 
En Francia, Holanda Y Canadá, ya se suprimió al fogonero, cuando las locomotoras diesel o eléctricas están dotadas de dispositivos de seguridad como “el pedal del hombre muerto”.
 
 Es decir- apunta gallegos- enfáticamente “en todas partes s e cuecen habas “, el caso de los garroteros , los furgones del tren necesitaban a este trabajador para que manejara los frenos de mano. Hoy en día los trenes traen frenos de aire no necesitan garroteros. El garrote o palo de apretar era de un árbol de por ahí de la huasteca mexicana. “duro, como la chifosca”.
 
Arrecia Gallegitos con sus recuerdos: Cuando yo fui formado en el PST, revisamos dela historia todos os movimientos sociales el pueblo mexicano y sus trabajadores, de eso nos alimentaban, buenos pensadores. La luchas de los maestros, de los médicos, los ferrocarrileros con vallejo que relata la Elenita Poniatowska en la novela “el tren pasa primero”, los movimientos estudiantiles el 68, y el 71.
 
Todo esto junto a las nacientes reformas democráticas y el nacimiento de nuevos partidos políticos. Pero aun así “México sigue a gatas”.
 
Pues en el caso de los trabajadores no podemos segur en la línea de que el salario no alcanza, y frente a las nuevas situaciones que se presentan el criterio no debe ser solo de una economía de salarios bajos, son el de velar por el interés de todos los factores: la nación, los trabajadores y al empresa.
 
Yo manejé un tren presidencial, el centauro del norte en zacatecas me lo entregaron era la campaña de Miguel dela Madrid, ahí empezó el neoliberalismo en México, la corriente democrática con Cuauhtémoc Cárdenas a la cabeza su salida del PRI y la fundación del PRD.
Lejos estamos ya de cuando en San Luis Potosí, Guillermo Medina de los Santos y Roberto “el chango” Leyva torres eran los asesores del sindicato ferrocarrilero, les pagábamos nosotros los trabajadores.
 
Y más lejos aún la revolución mexicana que se hizo arriba de los trenes. Y hasta atrás los primeros tendidos de vías que el 30 de marzo de 1890 fijó el ultimo riel para poner en servicio el ferrocarril San Luis- Tampico. 1.500.00 pesos costó cada km  de vía que solo llegaba a Soleda delos ranchos. Ahí a la mitad del camino se instaló la ceremonia que salió dela estación de la alameda central.
 
Y entre un panteón y la pobreza se celebró el acto, después vino la expansión ferrocarrilera r otro oaxaqueño llamado Porfirio Díaz. Con esta línea antes de llegar a Tampico se generó el descubrimiento del petróleo en Ébano.
 
Por esta historia apenas esbozada, por la vitalidad de tu trabajo y compromiso social, Alberto Gallegos, “!No te mueras!”, representas vivo al igual que muchos trabajadores como tú el valor y a decisión de defender las mejores causas de México, entre ellas las de tus “compas” los trabajadores del riel. La no corrupción y la honestidad e integridad, frente a los movimientos sociales. pfelix2000@hotmail.com P.I.