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En varias ocasiones hemos comentado en este espacio, el riesgo de que la canadiense Minera San Xavier suspenda en definitiva sus operaciones de explotación del mineral en el municipio de Cerro de San Pedro sin cumplir con su compromiso de remediar la zona contaminada por el cianuro y arsénico empleados intensivamente en sus labores extractivas de oro y plata.

Desde el año pasado los directivos de la firma empezaron a anunciar la cancelación  de sus operaciones y su salida total de ese municipio, lo que, evidentemente únicamente se trató de una maniobra encaminada a ganar tiempo a fin de evadir su responsabilidad de sanear el área contaminada con dichas sustancias altamente  venenosas, trabajos que hasta la fecha no han empezado a realizar ni dan muestras de pretender hacerlo con todo y que cuando las presiones para que lo hagan los obligan a dar la cara para salir de nuevo con sus promesas respecto de que ya planean realizar actividades en ese sentido.

Sin embargo, podría darse el caso de que, como lo dijimos hace un tiempo aquí, la MSX se vaya de San Luis Potosí como las chachas sin avisar y dejar tirados los pendientes de lo que puede tomarse como un indicio el hecho de que la empresa ha empezado a tratar de vender algunas de sus propiedades para el almacenamiento de sus propiedades tarea en la que la empresa  está apoyándose en las relaciones y conocimientos de distinguidos maestros de la UASLP como Roberto Francisco Ortega Badillo quien colabora con la firma como valuador de lo que vende.

El temor entre los grupos ambientalistas radica en que luego de vender sus propiedades la Minera ahora sí cumpla su anuncio de salir de Cerro de San Pedro definitivamente sin sanear las extensiones saturadas de arsénico y cianuro que en esta temporada de fuertes lluvias puede acentuarse ante el peligro de que las mentadas y débiles lagunas de lixiviación se vean desbordadas por el agua de tal manera que puedan ocasionar filtraciones a los mantos acuíferos que se extienden hasta la zona metropolitana de los que extraen el agua para el consumo  humano, lo que no se ve sea vigilado por autoridad alguna y fundamentalmente, ponerle un marcaje personal para que no se haga humo cualquier día de éstos, para no llorar mañana como mujercitas lo que hoy no sabemos, o queremos, defender como hombrecitos.

CABOS SUELTOS

Un gran valor civil y una firme confianza en la justicia demostró Margarita Ortiz al denunciar públicamente la brutal agresión sufrida a bordo de un autobús de la línea ETN cuando regresaba de la ciudad de México a la capital potosina, hecho al que se le dedicaron algunos minutos en el noticiero estelar de televisa de anoche, desde aquí nuestra solidaridad y felicitación por su valor para enfrentar el hecho, ánimo Mague ésas lacras pronto amanecerán tiradas en algún baldío víctimas de su misma especie por aquello de que el que a hierro mata…