Jueves 25 de Abril de 2024 | San Luis Potosí, S.L.P.

ESPACIO DE REFLEXIÓN

Dr. Jaime Chalita Zarur | 23/05/2016 | 17:05

En San Luis Potosí y, en la Republica Mexicana, después de años, 8 para ser exactos, el próximo 18 de junio de 2008, fue publicado en el diario oficial de la Federacion, la reforma constitucional que sienta las bases para el establecimiento de un nuevo sistema de justicia para México. 

El  Constituyente Permanente,  se dio a la tarea de proponer un sistema en el que se respeten los derechos, tanto de las  víctimas y ofendidos como de los imputados, partiendo de la presunción de inocencia de este último, lo que de por sí, es un gran reto y responsabilidad profesional para la autoridad, fortaleciendo, según el Costituyente,  el debido proceso y el respeto pleno a los derechos humanos de quienes son involucrados en una investigación o procedimiento penal.

Se trata de basarse en un sistema acusatorio  de partes adversas y, donde el juez debería resolver en forma imparcial frente a la solicitud de los que intervienen y que, los conflictos relevantes se resuelven en audiencias públicas, orales y contradictorias. 

Posiblemente lo público de estos procesos, inhiba cuando menos un poco, la corrupción y desde leugo, la impunidad con la que algunos se han manejado como jueces que por conveniencia o por dádivas, resuelven en contra del interés público.

Todo lo anterior debería traducirse en mayor transparencia y eficacia a un menor costo de recursos públicos, tiempo y carga para las partes implicadas en cualquier conflicto.

Visto así, suena bien y, desde luego atractivo, en comparación,  con los miles de expedientes que existen en nuestro Estado en brutal rezago que ahí están, muchos durmiendo el sueño, en este caso de los injustos y que contribuyen a que la impunidad intente matarnos socialmente, como lo ha hecho en los últimos ocho años que de por sí, han sido una gran perdidas de tiempo en quienes disque impartieron justicia pero solo se abono a la corrupción e impunidad.

¿Donde habrán quedado todos los millones de recursos que se destinaron para llevar a efecto la creación de la infraestructura de este nuevo sistema penal? ¿Quién o quienes han sido responsables de la inoperancia en nuestro Estado? hasta ahora solo se habla de la fecha límite pero, no mucho de responsabilidades. 

Recordar que hace ocho años eran los últimos dos de Marcelo de Los Santos Fraga y los seis del desastroso sexenio de Fernando Toranzo Fernández. Los cual traerían  alguna respuesta o, muchas. Indudablemente los últimos seis años la administración gubernamental pasada sufrimos injusticias a plenitud y la ausencia, aún cuando había, de un procurador de justicia que solo servía de adorno en la oficina que ocupaba.

Ahora con prisas, obligadas por la indolencia de Toranzo y su "brillante"procurador, con letras muy chiquitas, es que se trata de hacer frente a este tema y a marchas forzadas.

Convocada la ciudadanía por El actual Procurador de Juticia, Maestro Federico Garza Herrera, para formar el Consejo de  Participación Ciudadana, de la PGJE, se torna un un gran acierto, pues no cabe duda que la infiltración de la maldad, ha quedado muy adentro de las instituciones y la mejor manera de combatirla, es actuando con quienes nos interesa retomar el verdadero estado de derecho.

Buenos resultados, de Procurador de Justicia, aún cuando contra corriente, se van dando y lo ocurrido el fin de semana pasado, con la captura de delincuentes, por delitos de alto impacto, abona a la esperanza de combatir en serio la impunidad, desde luego la corrupción.

A marchas forzadas iniciará el nuevo sistema penal en nuestro Estado, debe ser irreversible y mejorando cada día. No solo se ha generado indolencia de parte del sector público, en ocho años de retraso, también de los litigantes que han querido ser capacitados por las instancias públicas, pero, no todos se esperaron a la  indolencia a oficial y, en forma particular muchos despachos de abogados buscaron actualizar sus conocimientos y,  serán ellos quienes aprovechen mejor las oportunidades. Todo sacrificio debe tener recompensa.

México sigue siendo un país grande, pero aún con sus ventajas y bondades México no ha podido ser una potencia económica. Nuestra debilidad son las instituciones donde parece que la corrupción y la impunidad son nuestro principal lastre. Muchos de nuestros políticos, independientemente del puesto que ocupan y, a pesar de la pobreza y falta de trabajo, además de oportunidades, siguen beneficiándose de los recursos públicos; ejemplos sobran en San Luis Potosí, con los cuestionamientos más agudos y más profundos de la población que día a día se indigna más.  

Es la hora de un México más justo, más incluyente y para todos, diría Luis Donado Colosio, también el fortalecimiento de la fuerza democrática ciudadana perseguida por Salvador Nava. Es la hora de ser responsables a la causa ciudadana, es la hora de todos, cerrando el camino del raterismo institucionalizado. 

 

jaimechalita@yahoo.com

@jaimechalita