A Diestra y Siniestra

EN LO MÁS ANIMADO de la fiesta alguien pidió la atención de todos, una vez conseguida les solicitó, los amigos de la novia por favor hagan una fila del lado derecho, los del novio del lado izquierdo. De inmediato se formaron dos largas filas sólo unos cuantos se quedaron en sus lugares limitándose a mirar la escena. Esos poquitos han de ser familiares o amigos de los dos, comentó alguien. En eso el que los había invitado a formarse les dijo, pues ahora sí, todos en fila derechito a la… a la… a la calle, a volar gorrones porque esto no es boda es bautizo. La anécdota indica que en una fiesta los participantes pueden ser muchos y muy diversos, incluidos los colados, pero no hay nada que indique que deben conocerse entre ellos o ser amigos. El único punto de coincidencia que deben tener es el de ser amigos o conocidos de los dueños del guateque o del o los festejados, bueno, reconociendo también que los gorrones o calados se van por la libre y no conocen a nadie. Que a una fiesta concurran adversarios políticos no quiere decir que haya acuerdos entre ellos o que unos se hayan alineado –alineado no alienado- con los otros. José Luis Romero Calzada tuvo una fiesta de primera comunión y confirmación, la primera comunión fue de uno de sus hijos. Lo que confirmó es que Ricardo Gallardo Cardona es su amigo y lo invitó, al igual que a sus dirigentes y compañeros de partido y a sus colegas diputados. Por eso en la fiesta hubo de todo, de dulce, de chile y de manteca, o de aceite, tal vez será mejor decir.

DIJERON QUE LA CORDIALIDAD interpartidista se debió a que los invitados saben comportarse y a los buenos oficios del anfitrión, sin embargo no tardó en salir el súper desaforadiux a declarar, para presumir que el héroe de esa jornada fue él y sólo él. “La verdad de lo que pasó ahí y por lo que se armó tanto relajo”, dijo, “fue algo que yo propicie, no fue ni Ángel Castillo ni nadie más”. “En la fiesta de la primera comunión del hijo de mi amigo José Luis Romero Calzad –aseguró- nos dieron una hojita con algunos propósitos y reflexiones y uno de ellos hablaba de perdón y reconciliación y a mi me pareció perfecto”. “Lo tome y fui a ver a Ricardo Gallardo Juárez para decirle que si en algo lo había ofendido o algo había hecho que lo hubiera molestado, le pedía una disculpa y que nos diéramos un abrazo y así lo hicimos”. “Luego fui por Chafiro –así lo dijo- y le pedí que hiciera lo mismo y aceptó”. “Creo que Chafiro”, agregó, “no lo tomó en serio porque todo lo hizo riéndose, pero se dieron el abrazo, yo fui el responsable de todo, nadie más”, sostuvo enfático, no le vayan a ganar tan admirable triunfo político.

EN LO QUE FUE EL IRRESPONSABLE de todo o de todos, fue en Plaza Sendero. A Sergio Desfassiux Cabello, se le ocurrió manifestarse exhortando a la clientela a no pagar el costo del estacionamiento, exigiendo el cumplimiento de una ley, aprobada por la legislatura anterior, prohibiendo a los centros comerciales cualquier cobro por ese concepto. Incurriendo en una clara usurpación de funciones, dijo en tono jocoso alguien que conoció del incidente pues sucede, dijo, que las manifestaciones de ese tipo son facultad de los simples ciudadanos, los que tiene cargos de elección popular y forman parte de uno de los poderes del estado, en este caso el Legislativo, tienen otros medios para hacer valer las leyes, por ejemplo exigirle a la autoridad que corresponda que la aplique.

SE IMAGINAN A DESFASSIUX encarando a Gallardo como lo hizo con el empleado de la plaza que llegó a hacerle ver que la ley que invocaba no tiene sanciones y que además no se puede aplicar porque hay un amparo del Poder Judicial. Si así lo hiciera, si encarara a Gallardo de ese modo el que tendría que ampararse sería el diputado. Van a decir que no lo necesita porque tiene fuero, pero el amparo de la Virgen de Guadalupe y el de toda la corte celestial, si lo necesitaría ante la inminente y contundente respuesta que seguramente la daría la gallardía en pleno, pero no hay borracho que coma lumbre y por eso prefiere hacer sus desplantes ante otras personas.

LO MALO ES QUE SU MANIFESTACIÓN pública la hizo en propiedad privada y que exigía el cumplimiento de una ley que está sin efecto, aunque sea temporal, por mandato judicial, por lo que pretender y exigir que se aplique es, de alguna manera, incurrir, por su parte, en desacato a una determinación del Poder Judicial Federal. Y si de desacatos se trata, la aparición en la escena del diputado priista, José Luis Romero Calzada, es un desacato a la congruencia política y partidista; así como la utilización de niños por parte del diputado perredista, según se ve en los videos difundidos, es un desacato, por no hablar de violación, a la legislación que prohíbe la explotación y el maltrato infantil.

LOS QUE DICEN que también piden amparos, son los dirigentes del PRI y el PRD, cada que se enteran de los hechos que protagonizan sus muy brillantes diputados, don José Luis Romero Calzada y don Sergio Desfassiux, respectivamente. NOSOTROS DECIMOS

Aunque saben de malicias

Y no haya quién les repare,

Cuando de ellos tienen noticias,

¡Dicen que Dios nos ampare!.

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