Viernes 29 de Marzo de 2024 | San Luis Potosí, S.L.P.

Espacio de Reflexión

Jaime Chalita Zarur | 21/03/2016 | 12:26

El gobierno, se ha convertido en el hijo adoptivo de los intereses atrincherados.

( Theodore Roosevelt ) 

No me ha parecido que nuestro País, tenga un sistema legal y judicial malo, aun cuando en ocasiones es extraordinariamente formal, lo que nos afecta es la iniquidad y, desde luego en muchos caso, sobre todo en el sexenio que hace algunos meses dejamos atrás, la selectividad de la persecución de los delitos y la conveniencia de hacerlo, cuando se trata de hacer justicia. Sin embargo el espacio de actualizar nuestras leyes, debe darse pero, siempre en el contexto del interés público y no, del personal o,  de grupos.

Se advierte en el ambiente de la elaboración de leyes y, a quienes les interesan hacer algunos cambios, facilitar el camino al odiado autoritarismo, se busca el control de las personas que vivimos en San Luis Potosí, quienes hemos conquistado muchas libertades cívicas y que ahora se puede caer en la situación, nada buscada, de ser inmovilizados por la creación de leyes que no beneficien a los ciudadanos en lo individual pero, tampoco, a la libre empresa. La democracia es la participación de más sociedad y menos gobierno.

El alza de violencia en nuestra Entidad Federativa, negada por las autoridades, hace que en la conciencia de lo ya vivido en el pasado, retorne él temor de perder  la vida  por ejercer la libertad en la expresión, de las ideas y, se paralice la conciencia social. Pareciera hemos retornado al escenario que dejamos en el 2009. 

Hemos sido víctimas de la impunidad, del no ejercicio propio de la ley y su aplicación, hemos sido víctimas de nuestras desiciones al votar, pero también lo hemos sido de las personas a las cuales se les ha dado la confianza de servirnos. La traición no se ha hecho esperar cuando se tiene el poder de hacerlo. Los enemigos declarados se suscriben en el renglón del respeto, pues de ellos, se sabe a dónde quieren ir y no lo esconden. Pero llega el momento que pareciera que todos los somos de quienes les pagamos por administrar la Ciudad o el Estado, así igual, la Federación. 

Muchos intereses y tolerancia selectiva es que, ha generado la corrupción y con ello impunidad, es el cáncer social que nos quiere matar. Adormecer la conciencia social y dividirla con dádivas, es lo conveniente para algunos que gustan de estas prácticas. No es que se esté en contra de la solidaridad pero, sería diferente si y solo si, hubiese el intercambio de alguna función por lo que se recibe, es decir nadie aprecia lo que no cuesta. 

Nunca ha sido bueno, en ninguna parte de la historia humana, crear expectativas  de la cultura de no trabajo, del no esfuerzo que genera riqueza. Eso  produce en nuestro País, una división de clases, odiosa por cierto, de ciudadanos, unos de primera, para quienes viven del dinero público y, que aportan los demás y, en ciudadanos de segunda para quienes pagan el sustento de nuestro País.

Seguro es que las leyes deben de modernizarse, en un entorno complejo del arribo de una era cibernética, si, pero siempre con tendencia a una democracia participativa y no centralista. México sufrió y, en algunas ocaciones sufre,  con el centralismo, sinónimo y acompañado del autoritarismo que la historia dejó atrás, cuando menos aparentemente en su inmensa mayoría. 

Nada bueno esperamos de la presente legislatura que ahora se caracteriza verdaderamente por ser broncos y que, debiendo ser ellos los primeros en buscar la generación de leyes en beneficio de la sociedad, lo hacen para ganar espacios de plena impunidad. En un circo es lo que se ha convertido esta legislatura, con descaro, falta de oficio y plena ignorancia que hace, por unos cuantos arribistas, pagan todos. 

Sergio Aguayo, analista político, del COLMEX, comenta que México, vive una "cleptocracia"  por qué lo servidores  públicos se dedican a tomar recursos públicos para intereses personales. Así es, igual que quienes investigan, ven a su propio País pero, también así nos ven quienes del exterior nos observan. Ahora con todas las expectativas que se dice San Luis Potosí, tiene en materia de economía, lo primordial sería un marco jurídico ágil, para evitar la corrupción pero también, aplicable indistintamente para quienes lo infringen, sería lo menos para aspirar a ser contemplados por inversionistas.

Pero que esperaríamos, con esta legislatura, peor que la que presidió; demandada judicialmente por el uso de 19 millones de pesos que repartieron a discreción y mucho dinero, justificado con facturas apócrifas o, de negocios de ellos mismos, ahora se niega esta legislatura a dejar su "privilegio" de usar estos recursos disque para ayuda social, pero que la inmensa mayoría del recurso va a parar a las bolas y cuentas bancarias de los legisladores.

Más participación ciudadana, obligada por cierto, pues los altos sueldos que pagamos aquellos a quienes les dimos nuestra confianza y la traicionan, lo hace así, para entrar en un orden social y poner un freno que detenga tanta idolatría personal que hace perder la razón, es el camino que decididamente ha tomado quienes cansados de tanta traición, se quiere termine. 

 

jaimechalita@yahoo.com

@jaimechalita