La llegada del Año Nuevo trae buenas noticias para los potosinos que seremos testigo de la construcción del primer Corredor de Movilidad Urbana, que viene a resolver los problemas que actualmente tienen los empleados de la Zona Industrial para llegar a su centro de trabajo.
El último día de 2015, la Secretaría de Desarrollo Urbano Vivienda y Obras Públicas (Seduvop) anunció que ya se tienen ganadores para la construcción de la obra que, una vez concluida, beneficiará a cuando menos 50 mil potosinos que hoy sufren para llegar a las factorías instaladas en la Zona Industrial.
A decir del titular de la Seduvop, Leopoldo Stevens Amaro, este Corredor de Movilidad Urbana se terminará durante 2016 y tendrá una longitud de 16 kilómetros, que comunicarán el Centro Histórico con una de las regiones de mayor crecimiento poblacional de la capital potosina y que durante muchos años ha padecido los problemas de transporte.
Una vez concluida la obra, los autobuses rápidos troncales no solo reducirán los costos de transporte para los trabajadores de la Zona Industrial sino que además bajarán también los tiempos de traslado, permitiendo así una mejor calidad de vida de quienes desarrollan actividades laborales para la industria potosina
A 30 AÑOS
Este día se cumplen 30 años de la mayor fractura en el tejido social potosino. Los ideales y métodos de lucha enfrentaron al pueblo contra el mismo pueblo en una lucha que no ha terminado de dirimirse, aunque en el camino ha dejado mucho de ideales y legitimidad.
El 1 de enero de 1986 fue la fecha definida para la toma de posesión de Guillermo Medina de los Santos, quien había ganado la alcaldía capitalina a Guillermo Pizzuto Zamanillo en una reñida elección que aún hoy día los simpatizantes del doctor Salvador Nava Martínez desconocen.
La hora del evento oficial se fijó para media mañana y los navistas citaron para una hora antes a sus contingentes en la plaza de Armas.
Los ingredientes para una confrontación estaban dados. Sólo faltaba ver quién lanzaría el primer golpe. Por eso se cambió la toma de posesión de Medina de los Santos para una hora antes de la llegada de los oposicionistas que, al enterarse, se enardecieron y no parecían dispuestos a negociación alguna.
Lo que siguió marcó el destino de los potosinos nadie ganó ese día. Pero sí hubo un gran perdedor: San Luis Potosí.
