Miércoles 24 de Abril de 2024 | San Luis Potosí, S.L.P.
local

Comer alimentos fritos tiene graves consecuencias: IMSS

Plano Informativo | 08/03/2012 | 19:31

Los sopes, huaraches, tacos, tamales, gorditas, entre otros alimentos tan representativos de la gastronomía mexicana y que fácilmente se localizan en puestos de la calle, resultan prácticos para la gente que tiene poco tiempo para desayunar. 

Sin embargo, consumirlos a menudo puede resultar dañino para la salud, advirtió Blanca Estela Pavón Velázquez, nutrióloga de la Unidad de Medicina Familiar del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS). 

Recordó que estos alimentos en su mayoría son preparados con grandes cantidades de aceite y/o manteca que contienen altos niveles de hidratos de carbono, los cuales junto con la grasa dan energía, que al no ser ocupada, se almacena en forma de triglicéridos y colesterol principalmente, lo que llega a causar sobrepeso u obesidad.

La especialista señaló que esto puede desencadenar problemas cardiovasculares, como cardiopatía coronaria (infarto del miocardio), trombosis, hipertensión arterial, incremento de colesterol y triglicéridos y ateroesclerosis (engrosamiento de paredes arteriales), entre otros padecimientos derivados del problema de peso.

Pavón Velázquez sostuvo que un desayuno nutritivo debe contener una ración de fruta y de leguminosa o producto de origen animal (lentejas, queso, huevo), así como dos piezas de verduras y cereales o tubérculos (papa, semillas, pan).

En caso de consumir sopes, quesadillas o fritangas es recomendable que se elaboren en casa con poco aceite (grasa), e incluirle más verduras y leguminosas (frijol) para balancear el alimento, subrayó la dietista.

Asimismo, recordó que practicar algún deporte por lo menos 30 minutos diarios ayudará también al organismo a ocupar la energía que se consume en cada comida para evitar que se almacene como grasa.

De igual modo recordó que el primer alimento del día brinda los nutrimentos que requiere el cuerpo, como hidratos de carbono, proteínas, lípidos, vitaminas y minerales para mejorar el funcionamiento del organismo.

 

Un desayuno nutritivo aumenta la capacidad de concentración y aprendizaje, disminuye el riesgo de sufrir sobrepeso y obesidad, y se obtiene la energía para realizar las actividades.